El Asmubal Meaño no tuvo rival ante un Camariñas al que desbordó en el arranque. Un parcial 5-0 de salida obligó al técnico visitante a intentar parar a la meañesas, pero resultó baldío.
El 5-1 defensivo local, con Anabel como avanzada, estuvo presto a los cruces y los robos de balón se prodigaban para resolverse con contragolpes francos que siguieron poniendo terreno por medio.
Renta en crecimiento
Al cuarto de hora las de Cynthia Bello, ganaban de ocho (13-5), ante un Camariñas que había pagado con hasta tres exclusiones, aderezadas por las protestas de su técnico. Así las cosas la renta crecía a hasta una máxima de 10 en el período (19-9).
Con el partido resuelto la segunda parte sirvió para probaturas en las meañesas, repartiendo minutos en un partido plácido, con ataques que, cuando jugaban en estático, resolvían pronto con circulaciones, hallando huecos con facilidad en una defensa visitante que había bajado sus brazos.
Solo en el ataque visitante emergía a ráfagas la poderosa Tmian, jugadora de color que quitaba partido de su físico. Así las cosas la renta crecía a 17 en el 40' y llegaba al término casi doblando al Camariñas (37-19), con una Anabel entregada al juego que con 11 goles volvió a brillar.
La victoria coloca a las meañesas cuartas, con 6 puntos, empatadas con el Porriño, y tan sólo a un punto de Moaña y Pabellón que comparten liderato, pero con un partido menos del Asmubal por calendario con los tres que le preceden.
