Dos tendencias claramente contrapuestas se pulsan esta tarde (17.00 horas) sobre el césped de A Magdalena. Rácing Villalbés y Ribadumia serán los que estarán en liza llegando a la cita desde posiciones lejanas, tanto en lo anímico como en lo clasificatorio.

Precisamente es esta cuestión la que lleva a Luis Carro a activar aún más su nivel de cautela. El técnico quiere pasar página cuanto antes a la euforia que se pueda haber generado con la presencia el pasado miércoles en la final de la Copa RFEF. El primer objetivo previo a la visita de esta tarde pasaba por volver a focalizar a la plantilla en los menesteres ligueros.

Además, Carro tampoco pasó por alto el grado de necesidad de los lucenses. El hecho de que el Villalbés se presenta a la cita tras cuatro derrotas consecutivas es una cuestión que el técnico de los aurinegros ve más como una amenaza que como un síntoma de la fortaleza rival. Más aún tras presenciar su último partido ante el Bergantiños en el que, a su criterio, su rival de hoy mereció más porquefue muy superior al líder en la segunda parte.

Tras el desgaste de los 120 minutos del miércoles en San Lázaro, el Ribadumia desplazará a 18 jugadores para descartar a dos en el vestuario. No están en la lista Fandiño, Cerque, Eloy y Teti.