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Kickboxing - Campeonato de España

El talento de O Grove crece golpe a golpe

Ainara Álvarez obtiene un bronce en su categoría en la prueba disputada en Marín

Ainara Álvarez (dcha.), en el podio del Campeonato de España. // FdV

Tiene tan solo 16 años, pero se ha convertido en uno de los talentos con más futuro del deporte en O Grove. La joven Ainara Álvarez sumó el segundo podio de su vida en un Campeonato de España de Kickboxing, alcanzando el bronce en el certamen que se celebró en la ciudad de Marín. La competición no resultó sencilla para la joven, que debutaba en su actual categoría y se enfrentó a luchadoras de mucha más experiencia, pero consiguió llegar hasta las semifinales y subirse al podio.

Álvarez comenzó a practicar kickboxing en enero de 2017, deporte al que llegó desde el kárate, en el que estuvo entrenando siete años. Este deporte la conquistó de inmediato, y tras enrolarse en las filas del Poio, su crecimiento ha resultado espectacular, con una plata en su primera participación en un Campeonato de España y un bronce este año. El salto del kárate al kickboxing resultó sencillo ya que "no es un deporte tan disciplinado y se centra más en el combate, que es lo que a mi me gusta".

Álvarez reconoce una modalidad de contacto como el kicboxing "está catalogado por la sociedad como un deporte masculino y veo como a muchas chicas, sus familias, no se lo dejan practicar por lo que no somos muchas las mujeres que estamos en él, pero para nada es así". De hecho, ella cuenta con una entrenadora y considera que "poco a poco esos prejuicios se van superando y cada vez somos más las mujeres que entrenamos". Otro de los prejuicios existentes es que se trata de un deporte violento. "Es evidente que en un combate puedes recibir algún golpe, pero existen unas normas que todo competidor debe respetar y que todos cumplimos; puede que en los partidos de fútbol se repartan más patadas malintencionadas que en un combate de kickboxing, y sin embargo, no existe la concepción de que el fútbol sea un juego extremadamente violento", señala.

Sus próximos objetivos es continuar aprendiendo para crecer como competidora y, en algún momento, dar el salto internacional y disputar un Europeo o un Mundial. "Sería un sueño, pero soy consciente de que deportes minoritarios como este apenas cuentan con ayudas y resulta muy caro desplazarse a alguna de estas competiciones", explica.

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