Después de tres derrotas consecutivas, el Cortegada se reencontró ayer con la victoria en la cancha del colista, el Universidad de Oviedo. Las vilagarcianas, a causa del temporal "Félix", vivieron toda una odisea para llegar a la cancha asturiana, a donde arribaron tan solo 40 minutos antes de que se iniciase el partido.

Pese a ello, las pupilas de Rubén Domínguez ofrecieron un buen juego que las llevó a hacerse con el triunfo.

El encuentro arrancó muy igualado, con un primer cuarto lleno de alternativas en el marcador, pero en el segundo, la superior calidad visitante se hizo manifiesta y permitió al Kemegal Cortegada lograr una ventaja de ocho puntos al descanso, una ventaja que se gestó, sobre todo, en el dominio del rebote ofensivo, ya que las vilagarcianas acabarían atrapando un total de 20 bajo el aro contrario. Esa distancia parecía definitiva, pero el Universidad de Oviedo despertó al regreso de los vestuarios, y a través de su tiro exterior y con una defensa en zona que dificultaba los ataques en estático visitantes, consiguió acercarse en el electrónico.

Pese a ese esfuerzo local, las vilagarcianas comenzaron a leer bien la zona local, algo que, junto al dominio bajo el tablero, les permitió hacerse con una renta cómoda de 10 puntos que las locales ya fueron incapaces de reducir, permitiendo una cómoda victoria a un Cortegada sin opciones de pelear por el play off de ascenso, pero si de alcanzar la quinta plaza de la tabla.