Golpe de autoridad el dado por el Villalonga en A Illa. Los jugadores celestes salieron a defenderse atacando todas y cada una de las posesiones del Céltiga y la apuesta dio sus frutos teniendo a favor cuestiones tan determinantes en el fútbol como el acierto en momentos muy puntuales del choque.
Buscaban los de Antonio Fernández un espaldarazo a su buen juego en los últimos partidos y éste llegó en medio de un escenario perfecto. Además, el perfecto conocimiento entre ambos equipos se plasmó desde la primera acción. El Villalonga salió decidido a presionar la salida de balón local y el Céltiga también demostró donde buscarle las cosquillas. Todo ello derivó en una primera parte de continuas alternativas en las áreas.
Pichi tuvo la primera gran ocasión local pero no remató fuera en el mano a mano ante Iván Parada tras un buen pase de Nelo. Tras un primer acercamiento serio de los visitantes, el número de situaciones con marchamo de gol volvió a tener la firma local. Primero Emilio tras un córner y posteriormente Machu, con un cabezazo que se fue arriba, metieron el miedo en el cuerpo a su rival.
El Villalonga buscaba el camino más rápido hacia el área rival por las bandas. Un activo Rubén Cerqueiras asumió la mayor parte del peso ofensivo de su equipo a la hora de generar situaciones de ventaja. En una de ellas sirvió un buen balón a Javi Pazos que no acertó a dirigir bien su volea con pierna izquierda. El Céltiga protagonizaba buenas fases con el balón, pero en el último cuarto de verde las luces se le apagaron más de la cuenta para poder darle continuidad a sus combinaciones.
Después de una dinámica de ritmo y presencia en las áreas, llegó el gol en el momento más inesperado. Aarón logró sacar una falta al borde del área que Pablo Mota ejecutó a la perfección. Un gran gol que llegó cuando ya se había rebasado el minuto 45 para desgracia de la parroquia local.
En una nueva tesitura, Antonio Fernández reforzó su mediocampo tras la salida de vestuarios. Bajó claramente la línea de presión al balón y el Céltiga buscó con todo el empate, pero faltaba ese último pase tan necesario. Edu Charlín leyó el nuevo escenario y apostó por la presencia de dos delanteros con la entrada de Ramón, pero poco después llegó el 0-2 en un error del meta Sergio a disparo de Cerqueiras.
Lejos de venirse abajo, el Céltiga se recompuso. Insistió en su rumbo hacia la portería celeste y Nelo recortó diferencias tras un muy buen servicio de Paco que el de Vilanova mandó a la red entre un bosque de piernas. Pero solo un minuto después, el Villalonga volvió a dar en la diana. Javi Pazos se aprovechó de la excesiva contemplación de la defensa para controlar un balón con el pecho y hacer el 1-3 con un buen derechazo.
El insistente Céltiga se resistió en todo momento a dar el partido por perdido. Apretó todavía más en su afán por llegar al área contraria, pero pese a sus acercamientos prácticamente continuos no hubo manera de meterle el miedo en el cuerpo al Villalonga. Los de Antonio Fernández incluso redondearon el resultado ya en el tiempo de descuenta tras un error en la entrega de Sergio que permitió a Padín hacer a placer el 1-4 definitivo.
