El Céltiga no tuvo ninguna compasión del colista, tan solo esperó a la segunda parte para infringir las tres estocadas mortales en forma de goles que sentenciaron un encuentro en el que fue superior, a lo que se unieron las dos expulsiones que sufrieron los locales. La victoria permite a los de Edu Charlín escalar a la zona de promoción de ascenso, rehaciéndose a la perfección de su primera derrota de la temporada, la del derbi contra el Arosa.

El partido comenzó con los futbolistas locales aplicando una fuerte intensidad a la presión de la salida de balón del Céltiga. Fruto de este poderoso arranque, llegó la que acabó siendo la mejor ocasión del partido para el Órdenes. Una internada de Fran Monroy por la banda izquierda acabó con el esférico en el larguero y Víctor Hervés fue incapaz de controlar la fuerza del rechace, que envió alto. Con el paso de los minutos, el trabajado posicionamiento de los hombres de Edu Charlín, unido al bajón de rendimiento de los jugadores del Órdenes, provocó que cambiase la tendencia. El Céltiga se hizo dueño en el tramo final de la primera parte y contó con una ocasión en las botas de Machu para adelantarse en el marcador.

La segunda parte sí fue un monólogo visitante. El derroche del Órdenes pasó factura y las ocasiones comenzaron a llover para el Céltiga. El dominio del equipo visitante fructificó rápido, con un tanto firmado por David Castro apenas un minuto después de la reanudación: el zaguero aprovechó un error de bulto del portero Ángel en el blocaje para empujar la pelota al fondo de la red. A partir del 0-1, el Órdenes se lanzó al ataque, aumentando la intensidad con algo de brusquedad, lo que llevó a Fran Monroy, la referencia local en ataque, a ser expulsado con doble tarjeta amarilla. Tras la expulsión, el duelo se rompió, lo que aprovecharon los visitantes para anotar dos tantos más, de Machu y Diego, a la salida de sendos saques de esquina.