El Náutico de Pontecesures se ha convertido en una de las grandes referencias de las categorías base del piragüismo gallego. Nombres como los de Camila Morison y Raquel Dacosta ya son habituales en competiciones internacionales, éxitos a los que hay que sumar la consecución del título de campeón de la liga infantil el pasado año. Esta temporada, el club lleva el mismo camino, pero ese enorme trabajo que viene desarrollando con las categorías inferiores no está siendo recompensado con la aportación económica que necesitan para su funcionamiento.
El club sobrevive de manera casi milagrosa, lo que añade un mérito importante a los resultados, por lo que su presidente, Ángel Barreiro, lanza una llamada de ayuda, al considera que "es necesario, de una vez por todas, que se apoye económicamente a este club por el trabajo que está haciendo, y cuyos resultados, tanto a nivel gallego, nacional e internacional, son de sobra conocidos por todos". El club ha sufrido varios reveses, como la caída de un kayak cuando regresaban de la última competición celebrada en Verducido, lo que le ha supuesto un quebranto de 1.000 euros, además de utilizar material muy anticuado, lo que le impide competir, en muchas ocasiones en igualdad de condiciones con sus oponentes. Las furgonetas en las que realiza sus desplazamientos también tienen una importante antigüedad y no tienen liquidez suficiente para afrontar la compra de una nueva a través del programa de la Diputación.
El llamamiento va destinado a administraciones públicas y a empresas privadas que quieran colaborar con una entidad que está ofreciendo unos importantes resultados. Esos resultados no han pasado desapercibidos para la Federación Gallega de Piragüismo, que ha seleccionado al cadete Mario Rodríguez para participar en las concentraciones de Semana Santa en el Pontillón do Castro.
