Mala entrada del año la del Arosa. En A Magdalena, un campo poco propicio a los buenos resultados de los vilagarcianos, se puso un broche nada decoroso a una primera vuelta que se cerrará en la novena posición con 26 puntos prolongando además a 16 años el tiempo sin ganar en el feudo del Rácing Vilalbés.

Tras unos primeros compases de tanteo pronto el partido empezó a tomar un claro cariz en favor de las opciones lucenses. No habían transcurrido ni cinco minutos cuando llegó la acción del primer tanto local. Sergio Arias originó la ventaja a partir de una apertura a banda izquierda. El balón llegó a Villares que superó a Marcos en el uno contra uno para introducirse en el área y servir generosamente el balón en bandeja para la llegada de Gerardo, que fusiló a Jorge Pérez.

Tenían claro los de Óscar Gilsanz que tenían que tapar la zona de creación de fútbol de los arlequinados. Para ellos tejieron una tela de araña en la medular buscando una superioridad que incomodó por completo a los de Piscis. Esa tupida red, unido al énfasis de los lucenses en no perder balones en zonas de riesgo, maniató las posibilidades ofensivas de los visitantes.

En ningún momento de los primeros 45 minutos encontró el Arosa la manera de tomar la iniciativa. Ni siquiera una mayor tenencia del balón se correspondió con llegadas al área rival. Los locales tenían bien claro que el partido se había decantado a su favor y trataron de castigar la mayor exposición de los vilagarcianos en forma de salidas rápidas tras recuperación.

Tal era la falta de soluciones de los arlequinados que el descanso se vislumbraba como la oportunidad de reorganizar ideas antes de que el destrozo se hiciese mayor. Lamentablemente aún se complicaron más las cosas con el segundo tanto del Vilalbés. Con Sergio Arias nuevamente como generador, el delantero centro recogió un saque de banda dentro del área para dar el pase atrás a un Maque cuyo disparo cogió a contrapié a Jorge Pérez. Incluso Piscis no quiso esperar al ecuador para intentar arreglar tal desaguisado e introdujo a Rivas por Cabanyes antes de la llegada del descanso para igualar las fuerzas en la zona de creación.

El paso por vestuarios se aprovechó para cambiar un poco el plan inicial y buscar más presencia en el área local. Sin embargo, y tal como sucediera en la primera parte, los de Óscar Gilsanz solo necesitaron de cinco minutos para darle la puntilla al partido con el 3-0. El omnipresente Sergio Arias se llevó el premio a su constancia al rematar al primer palo un centro desde la banda derecha de López tras revolverse en el área.

Ya con el partido muy cuesta arriba Sylla tomó el lugar en el campo de Óscar y el Arosa se lanzó a la desesperada. Aparecieron las presencias en el área, pero no la dosis de fortuna necesaria para meter el miedo a su rival. Rivas, primero, mandó alto un balón en el área pequeña y posteriormente el palo repelió un disparo de Adrián Camiño. Insistieron los vilagarcianos, pero el tanto de Alfonso llegó sin tiempo para la reacción.

La derrota deja al Arosa en una situación comprometida de cara a las próximas semanas. Y es que el exigente inicio de la segunda vuelta les obliga a visitar el próximo domingo al Cerceda, actual líder, para luego recibir en A Lomba al Deportivo B. Dos reválidas que calibrarán la reacción del equipo.