Decepcionado por el resultado, pero no así por el esfuerzo mostrado por sus jugadores sobre la cancha. Así se mostraba Miguel Ángel Hoyo a la conclusión del choque. Tal y como afirmó, "la prórroga fue un cara o cruz donde lo teníamos bien, pero fallamos dos tiros solos debajo de aro de Sergi y Max muy importantes pero no ha podido ser. Es una pena porque los jugadores trabajaron bien, pero hay que seguir".

Un debe que no pasa por alto Hoyo son los altos porcentajes del Zornotza, "a veces por un exceso de tensión en las líneas de pase hizo que algunas ayudas llegasen demasiado tarde y provocó canastas fáciles. Además su porcentaje de rebote en ataque fue muy alto y le dio canastas muy fáciles y eso nos penalizó mucho sobre todo en la prórroga".

Reconociendo que no descarta reforzar al equipo a la espera de lo que depare el mercado, Hoyo puntualiza que "de nuestras ocho derrotas, ésta es la sexta que se decide al final. Eso no es habitual ni justo".