Corría el minuto 85 del derbi entre el Cambados y el San Martín, cuando el jugador local Marwan resbalaba en la banda y estrellaba su cara contra las vallas publicitarias del campo de Burgáns. El tremendo golpe sufrido por el jugador le dejaba una gran brecha en la cabeza y empañaba un derbi que, hasta el momento, apenas había tenido incidencias. El joven fue trasladado en ambulancia al Hospital Domínguez de Pontevedra donde, al cierre de esta edición, continuaban realizándole pruebas para ver el alcance del golpe y para cerrar la herida. El técnico del Cambados reconocía ayer que "el golpe nos dejó a todos impresionados y aunque él quería levantarse, preferimos que esperase tumbado la ambulancia porque desconocíamos cual podía ser la gravedad de lo ocurrido".

Hasta que ocurrió el suceso Cambados y San Martín estaban protagonizando un derbi bastante pobre, en el que las imprecisiones y la escasez de ocasiones de gol fue la nota dominante. Los visitantes se jugaban algo más en el envite que los locales, ya que su situación en la tabla es muy complicada. De ahí que lastres ocasiones más claras del encuentro cayesen del lado rojillo.

Una la paro el portero, la otra se fue al larguero y la última se acabó escapando por la línea de fondo mientras rozaba el poste.

El Cambados, por su parte, llegaba al partido en cuadro, y sale de él todavía con más lesionados y peligrando la convocatoria de 11 jugadores para su próxima cita en Domaio, ya que a la cantidad de bajas que tenía antes del partido, se suman ahora la de Marwan y la de Augusto, que tuvo que retirarse del partido en el minuto 12 y todo apunta a que estará varias semanas de baja.