Arda Güler, la bala de plata de Ancelotti para el clásico que supo "chupar banquillo"

A Carlo Ancelotti, que entre una etapa y otra en el Real Madrid, lleva ya seis años viviendo en España, todavía le cuesta armar algunas frases hechas en castellano. La jerga nunca es sencilla para quien no tiene el idioma en cuestión como lengua materna. Pero hay una que domina a la perfección y de la que ha tirado a menudo últimamente: chupar banquillo.

Utilizó esa expresión por primera vez hace un par de meses, cuando le preguntaron sobre la falta de minutos de Endrick, también con mensaje hacia Arda Güler. "La historia de este club dice que muchos titulares han chupado banquillo mucho tiempo. Vinicius un par de años, Rodrygo, Valverde, Camavinga...", advirtió el italiano, frente a las presiones del entorno de los dos jóvenes futbolistas para que tengan mayor protagonismo en el césped.

Arda Güler confiesa cómo le convenció Ancelotti para fichar por el Real Madrid: "Camisa hawaiana, gafas de sol y un puro"

El pasado domingo, tras la agónica victoria contra el Celta en la que Arda Güler fue uno de los más destacados del Real Madrid, volvió a reforzar aquel discurso: "Hay que chupar banquillo para ser titular en el Madrid, y yo creo que lo ha chupado bien, no le ha molestado. Lo está haciendo muy bien, mejor que el año pasado, va progresando. Tiene el perfil de jugador titular para el Madrid".

Hay que chupar banquillo para ser titular en el Madrid, y yo creo que Arda lo ha chupado bien, no le ha molestado

Carlo Ancelotti

— Entrenador del Real Madrid

Y es que en este último mes calamitoso para el conjunto blanco, eliminado de la Champions, perdida la final de Copa y a cuatro puntos del Barça antes del clásico de este domingo, la mejor noticia, la única buena acaso, ha sido el crecimiento de Arda Güler. Ha sido titular en los tres últimos partidos de Liga y ha marcado en los dos últimos. Y en la final de Copa, salió a la hora de juego, contribuyendo a mejorar el rendimiento de los suyos, pese a la derrota final en la prórroga.

El mal momento de Rodrygo y Brahim

Su buen rendimiento en época de vacas flacas en el Madrid le abre las puertas de la titularidad en Montjuïc, en el costado derecho del centro del campo y en detrimento de un Rodrygo que desde febrero solo suma un gol, por delante de un Brahim cuyo rendimiento también se ha desplomado.

El previsible 11 del Madrid en Montjuïc: Courtois; Lucas, Tchouaméni, Asencio, Fran García; Güler, Valverde, Ceballos, Bellingham; Mbappé y Vinicius

"Hace dos meses di un palo a su gente de alrededor y ahora tengo que darles las gracias porque han hecho un gran trabajo con él", confesaba Ancelotti tras su excelente partido contra el Celta, apelando a un entorno complicado, que demanda para él tratamiento de gran estrella y que ha filtrado a medios internacionales el presunto malestar del chico y su voluntad de salir del Bernabéu en verano si no disponía de más minutos.

Su relación con Ancelotti

"Lo difícil es aprender español, adaptarse a la cultura y mantener los pies en el suelo", explicaba el chico en una carta publicada este jueves en el portal 'The Players' Tribune', en la que reconoce que "estar en el banquillo no es una situación fácil", sabiendo que tiene que ser "paciente". "Cuando Ancelotti dice que puedo convertirme en uno de los mejores centrocampistas del mundo, eso significa que el club tiene un plan para mí", expone.

Y es que en esa misma carta deja entrever una relación entrañable con Ancelotti ("nunca sé cuándo me habla en serio") que nació en una suerte de entrevista de trabajo que le hizo por videollamada en el verano de 2023, cuando el Real Madrid se anticipó al Barça para ficharle, procedente del Fenerbahce.

"El momento fue tan surrealista que me cuesta recordar los detalles, pero creo que llevaba una de esas camisas hawaianas, gafas de sol y creo que incluso tenía un puro", detalla Güler, quien apela a que Ancelotti "se convirtió en una especie de padre" para él desde sus primeros días en Madrid.

148 días lesionado

Esos inicios, con apenas 18 años, no fueron nada fáciles. Encadenó una lesión de menisco con otras dos musculares que le impidieron jugar un solo minuto hasta enero, 148 días lesionado. En el segundo tramo de la temporada, ya sano, apenas disputó 440 minutos repartidos en 12 partidos... aunque marcó seis goles, un ratio anotador espectacular. Este curso lleva cinco tantos en unos 1.500 minutos, habiendo participado en 39 partidos, en muchos de ellos de forma residual.

Y es que Güler no ha tenido mucha continuidad durante el curso, debido sobre todo a la competencia de los Bellingham, Vinicius, Rodrygo... En este accidentado tramo final de temporada ha llegado su oportunidad, su reto es demostrar que puede tener un rol importante en el Real Madrid de la próxima temporada, bien de extremo, bien de interior, la posición en la que su "padre" Ancelotti le ve brillando en el futuro. Pero eso ya tendrá que ser sin él. Xabi Alonso permanecerá atento.

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