Todo el mundo puede reinar: Mecalia y Orbe Zendal, a por el título

«No hay favoritos», sostiene Ana Seabra. Existen, en realidad; quizá no tan rotundos como en anteriores ediciones. Camufla la lusa que su Mecalia Guardés figura entre ellos. «El pronóstico es muy abierto, eso es cierto», matiza Isma Martínez, que sí menciona a Bera Bera sin desdecirse. Su Conservas Orbe Zendal otea ese horizonte. Los dos equipos acuden a la Copa de la Reina con legítima ambición. Quienes se coronen este domingo bien podrían ser gallegas.

La fase regular de la Liga alimenta la ilusión copera. El Mecalia acude a Granollers como líder destacado (36 puntos); el Orbe Zendal se ha consolidado como cuarto (26), cerca de Málaga (30) y empatado con Bera Bera (26). Andaluzas y vascas iniciaron el campeonato como principales aspirantes a los títulos domésticos. Se los han repartido, con escasas excepciones, en esta época. Pero al Málaga lo desalojó de la Copa el Morvedre (24-23) en la eliminatoria previa. Y el Bera Bera ha encadenado tres derrotas ligueras; una de ellas, ante el Orbe (21-22), que ya le había ganado en la primera vuelta (28-24). El Mecalia sí cayó en A Sangriña ante las donostiarras; su único tropiezo y por la mínima (26-27). Son, en cualquier caso, humanas.

«Siempre pondría como favorito al Bera Bera», insiste Isma, que respeta su experiencia y su jerarquía: ocho títulos de Copa desde 2007, incluidas las dos últimas ediciones. «Ha demostrado que es capaz de ajustar muy bien las cargas para llegar; lo demostró el año pasado en su Copa, cuando fue muy superior a todos. Se notaba un punto físico por encima».

Del Bera Bera se sospecha que el irregular rendimiento liguero obedece a su planificación. Ya clasificadas para cuartos en la European League, tal vez ahora desplieguen su potencial. También el Orbe, con menos recursos, ha tenido que identificar prioridades. A su marzo le estallan las costuras, con jornadas entre semana y semifinales de la European Cup contra el Hazena Kynzvart a la vuelta de un torneo en el que sueñan con disputar tres partidos consecutivos. En la Copa causa baja Daniela Moreno, que arrastra una microrrotura en el isquio. «Nos viene una avalancha de partidos. Tenemos que ser inteligentes», se propone Isma. «Lo que hago yo es diagnosticar bien cuáles son las batallas y creo que son los partidos de torneos eliminatorios. No sé cómo llegaremos a todo esto. Creo que lo afrontaremos bien, al menos inicialmente».

El Orbe debuta el viernes (13:00) ante el Elda (36-25 en Porriño en Liga), que a mediados de febrero contrató como técnico a Prades, exseleccionador y campeón de Liga con el Mecalia en 2017. Por su lado del cuadro, también el Bera Bera-Rocasa. «No podemos considerarnos afortunadas en caso de ser capaces de superar a Elda, que además viene en muy buen momento con la llegada de José Ignacio. Es un gran equipo. Estaba rindiendo por debajo de lo que ellas tienen o son», indica Isma.

Al Mecalia, en consecuencia, se le allana el camino hacia la final. Las guardesas se miden el viernes (20:30) al Beti-Onak (22-21 en A Sangriña) y esperan que el sábado, al ganador del Granollers-Morvedre, con las catalanas tal vez impulsadas por su condición de anfitrionas.

«Es evidente que todos estamos muy ilusionados con esta competición. Ganará quien esté mejor y cometa menos errores», establece Seabra, que ve a su equipo «tranquilo, entrenando bien y con todas las jugadoras –salvo Elena Martínez– recuperadas para participar». La entrenadora aguarda un estreno «muy competido.El rival estará muy motivado en su primera Copa. Seguro que intentará plantearnos muchas dificultades».