El de esta tarde es para el Coruxo uno de los partidos más importantes de las últimas campañas. La situación es complicada, que no crítica, y en los pies y la cabeza de los jugadores está revertir la situación y pasar un fin de campaña tranquilo. El equipo entrenado por Javier Maté y Jorge Otero recibe esta tarde en O Vao (16:45 horas) al que durante muchas campañas fue el farolillo rojo del grupo, el Polvorín, pero que ahora, sin presión están mostrando su mejor versión. Un hecho que lo confirma el haber sumado siete de los últimos nueve puntos disputados, lo que lo convierte en un rival tremendamente peligroso.
Para complicar más las cosas, el equipo vuelve al campo de O Vao, terreno hostil para los vigueses, en donde solamente han ganado tres de los catorce puntos disputados. Y este es un factor importante para la salvación, ya que de las cuatro jornadas que faltan para concluir el campeonato liguero, tres de ellas se disputarán en el campo de O Vao. Solo vale la victoria, y la primera de ellas tiene que ser esta tarde.
En el club no se le escapa a nadie la importancia del encuentro, y por ello la directiva decidió el acceso libre a todos los aficionados que quieran acudir al campo de O Vao,. Por lo que se espera una gran entrada.
El equipo sigue trabajando con normalidad a lo largo de la semana. Maté y Otero son conscientes de que no volverán a contar con Johan y Yelco, y con Mateo tienen serias dudas ya que no tiene ritmo de partido, y solo falta un mes para que esto se acabe. Además, en esta ocasión tampoco podrán contar con Bugarín por acumulación de amonestaciones. Con esto, es más que probable que el “once” inicial no sufra demasiadas modificaciones, teniendo que volver a convocar a algún jugador del equipo juvenil. Una situación que se puede considerar como positiva, teniendo en cuenta que el equipo ha conseguido la permanencia en la categoría y ya no tiene tantas obligaciones y puede comenzar a pensar en la próxima campaña.
Una de las claves para el partido de esta tarde será el de la concentración. El equipo debe salir metido desde el vestuario, y que no pase como el domingo pasado en Guijuelo, en donde en los primeros minutos de juego el partido ya estaba cuesta arriba con dos goles en contra. Otra cosa es el acierto de cara a la portería contraria, ya que es un mal endémico del equipo, no solo de esta temporada.
Jorge Otero, uno de los entrenadores del cuadro vigués, apuntaba tras el último entrenamiento, que “todos tenemos ganas de jugar este partido, ya que queremos resarcirnos del partido de Guijuelo, en donde encajamos dos goles demasiado pronto. Dos tanto que son evitables y que nos obligaron a remar contracorriente”. Sobre el partido de esta tarde ante el conjunto lucense, Otero indicó que “sabemos el equipo que tenemos enfrente. Es un equipo que está en un buen momento, que está haciendo las cosas muy bien, que viene de una dinámica de tres partidos muy positiva y tiene jugadores, incluso, con el primer equipo. Sabemos lo que nos vamos a encontrar, pero también lo que tenemos que hacer para sumar tres puntos importantísimos. Otra semana más estamos hablando de partidos, no definitivos, pero cada vez quedan menos puntos, menos partidos, y los de esta tarde son importantísimos”.
Jugadores y cuerpo técnico hace un llamamiento a la afición para que esta tarde llenen el campo de O Vao y jueguen un papel decisivo para que los vigueses sumen tres puntos que le permitan abrir una ligera brecha sobre los puestos de descenso, que en estos momentos tienen demasiado cerca, de ahí la presión.