Fútbol

La RFEF se personará en el 'Caso Negreira' y Tebas descarta "sanciones deportivas" al Barça

La entidad que preside Luis Rubiales emite un comunicado donde anuncia su participación "en los posibles procedimientos judiciales que se sigan sobre este asunto" | Desde LaLiga descartan la posibilidad de que el Barça sufra multas en la competición, pero diferencia los procesos penales que pueda enfrentar la entidad azulgrana

El presidente de la RFEF, Luis Rubiales.

El presidente de la RFEF, Luis Rubiales. / EFE

Denís Iglesias

Los pagos de 1,4 millones de euros efectuados por el Barça a DASNIL 95 SL, empresa de José María Enríquez Negreira, vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA) desde 1994 hasta 2018, han obligado a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) a mover ficha. La entidad que dirige Luis Rubiales dice que "acordó ayer (miércoles) mismo personarse en los posibles procedimientos judiciales que se sigan sobre este asunto". Por su parte, LaLiga descartó que se vayan a producir "sanciones deportivas" contra el Barça.

La RFEF reitera, tal y como hizo ayer el CTA, que "tras las elecciones a la Presidencia de la RFEF a finales de mayo de 2018, con la llegada del actual equipo de gobierno, se renovó la cúpula del comité, cesando a los anteriores directivos entre los que se encontraba el Sr. Enríquez Negreira". La fecha es importante porque a partir de la salida del excolegiado de su posición de relevancia terminaron los informes. En el mecanismo activado por la RFEF, su Departamento de Integridad inició este miércoles "un requerimiento de información reservada tanto a los responsables del CTA como del FC Barcelona".

La Federación continúa su comunicado asegurando que "exige, además de la declaración de no conflictos de intereses a todos los miembros de diversos órganos y empleados, una declaración ampliada firmada por todos los miembros de los comités disciplinarios y de designación arbitral en la que se obliga a detallar cualquier ingreso, al margen de lo percibido en la RFEF, que pudiera estar relacionado con el fútbol a los efectos de poder evaluar y verificar la efectiva y real inexistencia de conflictos de intereses".

Colaboración del CTA

Una consideración que entronca directamente con los 33 pagos que habría recibido Enríquez Negreira por informes verbales a través de una compañía gestionada en primera instancia por su hijo. Finalmente, la RFEF dice que "en el momento en que se disponga de la información suficiente, adoptará las medidas correspondientes dentro del marco de legalidad que debe imperar en todas estas situaciones". El órgano federativo va un paso más allá del CTA, quien al poco de desvelarse el presunto delito de corrupción emitía una nota "lamentando los comportamientos que puedan ser susceptibles de atentar contra la ética del estamento".

El comité arbitral establecía una frontera con el que había sido su vicepresidente, siguiendo el mismo camino que la RFEF, asegurando que Enríquez Negreira pertenecía a un gobierno anterior. Finalmente, el CTA se ponía "a disposición de la Justicia para brindar su máxima colaboración en cualquier tipo de información que pueda aportar".

La normativa federativa considera ilícitas estas actividades, siempre y cuando se confirme que los trabajos del exvicepresidente arbitral influían en las decisiones de los colegiados, algo que, por el momento, no se ha podido probar. En caso afirmativo, habría que tener en cuenta lo que recoge el Artículo 77 del Código Disciplinario. "Toda conducta dirigida a la predeterminación de resultados será considera como una infracción muy grave".

Sin sanción deportiva

El castigo para los autores de esta infracción será "la inhabilitación, por tiempo de dos a cinco años, además de la deducción de seis puntos en la clasificación a los clubes implicados". Con todo, la nueva Ley del Deporte y el Código Disciplinario de la RFEF, recoge que las sanciones muy grave prescriben a los tres años. "Se interrumpirá por la iniciación del procedimiento sancionador, pero si éste permaneciese paralizado durante un mes, por causa no imputable a la persona o entidad sujeta a dicho procedimiento, volverá a correr el plazo correspondiente", apostilla el articulado.

El último pago a Negreira por parte del Barcelona fue en 2018, coincidiendo con la salida del exárbitro. Sobre este aspecto ha incidido en su posicionamiento LaLiga, de mano de su presidente Javier Tebas. "No es posible que existan sanciones deportivas, puesto que entre 2018 y 2023 han pasado cinco años y este tipo de sanciones prescriben a los tres años", enfatizó el mandatario de la patronal, aunque diferenció la "jurisdicción penal" por la que pueda discurrir este caso.

"Desde LaLiga vamos a respetar la investigación que va a hacer la Fiscalía y, si ésta decide interponer la oportuna denuncia, nos tendremos que personar como acusación particular", explicó Tebas, siguiendo la línea trazada por la RFEF. "Ahora la Fiscalía está investigando los hechos sucedidos y, si puede existir un posible delito de corrupción entre particulares en la versión de amaño y en el ámbito deportivo. Vamos a ver cómo termina esa investigación", estimó el responsable de la asociación de clubes.

Además, el presidente de LaLiga insistió que va a requerir a los miembros del CTA "si tuvo alguna interferencia o intervino el señor Negreira en alguna designación". Según recoge la Cadena Ser, que destapó este caso, Enríquez Negreira habría dicho que nunca favoreció al Barça con decisiones o designaciones arbitrales -no dependían directamente de él y que su trabajo consistía en asesorar verbalmente a la entidad. "Lo que sí es una conclusión, que tanto estéticamente como éticamente estas cosas no pueden ocurrir en el fútbol español", concluyó Tebas, consciente del riesgo reputacional que entraña esta investigación para la entidad que él preside.