Fútbol

Sárdoma y Rápido conquistan la Copa Vigo

Sus segundos equipos se impusieron a Casablanca y Candeán en las finales

Las jugadoras del Sárdoma B celebran su victoria. |  // MARTA G. BREA

Las jugadoras del Sárdoma B celebran su victoria. | // MARTA G. BREA / REDACCIÓN

REDACCIÓN

El Sárdoma B tomó el relevo de su primer equipo en la Copa Vigo de fútbol femenino, mientras que el filial rapidista levantó el histórico trofeo copero para tomar el relevo del Alertanavia, equipo al que precisamente había tumbado en las semifinales. Las de Luis Otero golearon a un Casablanca mermado por las bajas (8-0) y los rapidistas se impusieron al Candeán (1-2)

Las obras en el Federativo de Coia obligaron a la Federación Gallega de Fútbol, organizadora del campeonato, a desdoblar las sedes. Y el partido de España lo complicó todo respecto a la hora prevista para la disputa de la final masculina, que se tuvo que retrasar hasta las 19.00 horas.

Por la mañana, al mediodía, el fútbol femenino se citó en el campo José Costas de Candeán, ante poco menos de un centenar de espectadores

Una jugadora del Sárdoma B controla el balón.

Una jugadora del Sárdoma B controla el balón. / MARTA G. BREA

Con tantas bajas (seis) en el San Roque Casablanca, estaba escrito que no habría final femenina. Y el Sárdoma B, candidato al ascenso a Primera Nacional, se encargó de dejarlo claro al segundo minuto de juego, con el primero de los tres goles que anotó Lucía Fernández.

Al descanso, ya 4-0, incluido un lanzamiento de penalti enviado fuera por la propia Lucía. Al final, cuatro tantos de Ángela Novas, tres de “Luchi” y uno de Sara Martínez, “Ove”, de penalti, para un 8-0 final. Pese al marcador, la guardameta del Casablanca, Candela Costas, salvó a su equipo de un buen número de acciones sardomistas.

Por la tarde, el duelo masculino dio mucho de sí. Primero, demostró que la regularidad del campeonato (el Candeán, en 2ª Galicia, marcha bien, con sus aspiraciones intactas; los boucenses, de 3ª Galicia, navegan por la mitad de la tabla) carece de valor en una final de Copa. Y más en la Copa Vigo, por la que todos pelean.

Disputa por el balón en la final masculina.

Disputa por el balón en la final masculina. / JOSE LORES

“Levantad la cabeza, que otros no han llegado hasta aquí”, era la arenga que se escuchaba entre los jugadores del Candeán tras la entrega de medallas y del trofeo de subcampeón. José Manuel Paz, “Josiño”, su capitán, ya vivió las de 2018 (ganada en los penaltis en O Vao) y 2019 (perdida en el Federativo de Coia). Esta vez tocaba cruz de nuevo.

El Rápido de Bouzas B fue un excelente campeón. Se adelantó de penalti (Aitor, minuto 36), recibió el empate cerca de la hora de juego (Lois, minuto 53), en una acción que salvó en primera instancia su portero, Hugo Alén, y se repuso para gozar de varias ocasiones, un balón al palo incluido. Su gol del triunfo llegaba tras durísimo lanzamiento de falta, no blocado por el meta blanco, que daba opción a un pase y a que Hugo Lobato, llegando desde atrás, metiera la bota para marcar.

El Candeán buscó balones aéreos para igualar. Un saque de esquina botado por Miguel Prada llegaba franco a “Toni” Fernández, que soltaba un cabezazo salvado in extremis por Alén casi al final del tiempo reglamentario. Y en el descuento, una falta botada por “Josiño” llegaba a Prada, pero su volea, en buena posición, se iba alta.

Celebración del filial del Rápido.

Celebración del filial del Rápido.

En ambas entregas de premios, a las que acudieron el concejal de Deportes, Manel Fernández, el vicepresidente de la RFGF, Fernando Iglesias, y el delegado federativo en Vigo, Delfín Alonso, así como las presidentas de UVCD Candeán y del Sárdoma CF, María del Carmen Martínez, y Begoña Aldao, subcampeones y campeones se hicieron mutuamente el pasillo en la entrega de trofeos.

El torneo más antiguo del fútbol gallego de entre los que siguen existiendo clausura así la edición de 2022. En 2023, la Copa Vigo alcanzará los 90 años de existencia.