La paz volvió a Red Bull con un doblete en la calificación para el Gran Premio de Abu Dabi, que cerrará el Mundial de Fórmula 1 con la lucha entre el mexicano Sergio ‘Checo’ Pérez y el monegasco Charles Leclerc (Ferrari) por el subcampeonato.

Después de la polémica de Brasil la semana pasada, donde el campeón del mundo, Max Verstappen, no le cedió la posición en la última vuelta a Checo, desoyendo a su equipo, Red Bull sufrió un conato de incendio con el enfado del tapatío, que echaba humo, al igual que las redes sociales, donde el neerlandés se vio arrinconado con comentarios muy desagradables.

Red Bull tuvo que salir al paso con un comunicado en el que asumía que el error había sido del equipo cuando le pidió a ‘Mad’ Max que dejara pasar a Checo sin haberlo comunicado previamente. El neerlandés, además, se brindaba a ayudar a su compañero en Abu Dabi.

El primer paso lo dio este sábado en la Q3, aunque no sin dudas. Cuando comenzó esa tanda, Pérez intercambió mensajes con el equipo. No veía a Max para el rebufo y le comentaron que el neerlandés había tenido problemas. “Haz tu camino”, le sugirieron.

Verstappen, que no había podido arrancar su monoplaza, sí apareció delante del mexicano en los últimos minutos de la tanda.

Checo no pudo batir el tiempo del neerlandés, el único que logró bajar de 1:24 (1:23.824) pero, al menos, aseguró la segunda posición y saldrá por delante de Leclerc. El mexicano agradeció la ayuda de Max en la entrevista a pie de pista, mientras los aficionados coreaban su nombre.

El monegasco, por su parte, partirá desde la segunda línea de la parrilla por solo 40 milésimas de segundo respecto a su rival, y tendrá a su lado al español Carlos Sainz.

Por detrás Fernando Alonso partirá de la décima posición con la intención de estar una vez más en los puntos.