“El rugby es un deporte para todos y para todas, con unos valores que están muy por encima de esa imagen física de contacto que a bote pronto se pueda tener”, discursea en off el presidente del Kaleido Vigo R.C., Xoan Martínez. En imágenes, mujeres y chicas del club placando, pateando, deslizándose y disfrutando. Es el primer clip promocional lanzado a las redes del documental que se ha elaborado sobre los treinta años de historia de la sección femenina. Una ojeada nostálgica al pasado. Un diagnóstico preciso del presente. Una previsión esperanzada de futuro. El próximo jueves estará disponible el relato completo.

Los miembros del Vigo R.C. ya conocen ese documental. Les fue proyectado en el acto de inauguración de la temporada, que se celebró en el monasterio de Oia. La institución ha vivido dos fundaciones. La original, exclusivamente masculina, se realizó en 1988. Cuatro años más tarde el club se abrió a las mujeres.

“Celebrando el 30 aniversario del femenino, se nos ocurrieron varias acciones”, explica Erea Martínez. “La más importante ha sido este documental, donde se cuenta la historia, anécdotas y cómo es nuestro futuro”. De la confección se ha encargado Marta Lago, productora audiovisual y creativa publicitaria pontevedresa. Lago ha creado la marca Woman Power, mediante la que pretende visibilizar el deporte femenino. Realizar este vídeo es la manera en la que ha vehiculizado su patrocinio.

Mujeres y chicas del Vigo Rugby, en el acto de inauguración de la temporada en Oia. Vigo R.C.

Son trece minutos de imágenes antiguas y recientes, artículos de prensa y entrevistas. “Sale gente del club de los inicios que ya vive fuera o que se ha desvinculado del rugby, pero que fue importante”, revela Erea. “En Oia lo vio la gente del club y la verdad es que fue muy emocionante”.

La directiva condensa el hilo argumental: “El resumen de estos treinta años es el esfuerzo que ha supuesto que el equipo femenino siga existiendo. Hemos pasado por baches importantes, pero también por éxitos. El objetivo principal es la captación. A nivel gallego y nacional está muy parado. Nos gustaría que lo llegase a ver la mayor gente posible para ver si conseguimos atraer a chicas”.

El Vigo Rugby presume de cantera masculina y femenina. Las categorías son mixtas hasta los 18 años. El equipo sub 16, por ejemplo, arrasó en la Liga Gallega con siete chicas en su plantilla. El corte se produce en la mayoría de edad, por abandono, estudios, traslado... Ha sucedido con la internacional Lucía del Campo, becada en la universidad estadounidense de Lindenwood.

Esa brecha limita la incorporación a la escuadra sénior. Con apenas 17 fichas cubiertas, cualquier compromiso o lesión impiden completar el XV. “Lo ideal es tener casi 30 fichas”, calcula Erea. “Flaqueamos en el tema de captación. No somos capaces de traer gente nueva al club mayor de 18 años”. No se requiere experiencia previa. Se acepta a “cualquier persona que le apetezca. No hace falta ni que haya hecho rugby ni nada, con tal de que tenga entusiasmo y ganas”. El premio es formar parte de los treinta años que se vienen.