Antoine Griezmann jugará en el Atlético la próxima temporada. Ni el jugador ni Simeone ni el club contemplan otra posibilidad, según han informado a este diario todas las partes. El futbolista cumplirá, en la 2022-23, la segunda temporada de la cesión cerrada que acordaron los colchoneros con el Barcelona. Será a la conclusión de la misma cuando, si se confirma que ha jugado el 50% de los minutos en ambas campañas (en la primera ha rozado el 70%), el Atlético se verá obligado a pagar el traspaso de El Principito, que está cifrado en 40 millones.

Masa salarial disparada

Griezmann no se convertirá en el Frenkie de Jong del Atlético. No se le sacrificará futbolísticamente con una venta para sanear las arcas atléticas. Aunque la realidad es que Miguel Ángel Gil Marín y Enrique Cerezo necesitan recaudar 40 millones porque la masa salarial de la plantilla está disparada y excede el límite en casi 100 millones.

En la rampa de salida aparecen Saúl, Lemar, Morata o jugadores más habituales como Giménez o Correa. Saúl regresa del Chelsea con una ficha de 7 millones netos que el club quiere liberar. A Lemar le resta un año y el club busca comprador para recuperar parte de los 72 millones de euros que costó. Giménez y Correa están en el mercado, pero que si se quedan serán bienvenidos por el Cholo.

Simeone ha priorizado los fichajes de un lateral y un centrocampista, que será el belga del Dortmund Axel Witsel. Llega libre, pero aún no ha podido ser inscrito debido al exceso salarial del club. Como 9, tras irse Luis Suárez, se baraja la opción de Morata, que regresa de su cesión a la Juventus. El jugador quiere, pero a Simeone no le seduce y el club le busca destino. A Andrea Berta, director deportivo atlético, le gusta Gianluca Scamacca, 9 del Sassuolo que ha debutado con la azzurra con 23 años.

Además, el Atlético, activará la palanca del ‘naming’ del Metropolitano para ingresar 50 millones en cinco temporadas.