Un fin de semana aciago en Alemania, en forma de caída y de problemas mecánicos, no ha podido empañar la alegría y satisfacción que todavía siente el piloto porriñés Yago Martínez, que el fin de semana anterior, en el circuito galo de Ernée, se subía por primera vez al podio en el Campeonato de Europa de 250 c.c.

En el Gran Premio de Francia conseguía cumplir uno de sus mayores anhelos, al ganar la primera manga y asegurarse su puesto en el podio (3º) tras finalizar décimo en la segunda manga. “Estoy muy contento, no podía pedir más”, proclama. “Este podio significa muchísimo. Es el primero que consigo de todos los sueños que tengo, y no era fácil. A partir de aquí tengo muchos más sueños por lograr”, anuncia: “Una cosa son los objetivos, pero otra son los sueños. Objetivos he cumplido mil a lo largo de mi carrera deportiva, pero este es el primer sueño que consigo”.

Así que ahora, tras dar el primer paso, ya se fija nuevos retos. Entre los objetivos está “volver a subirme al podio”. Y, si puede ser, con un segundo o incluso un primer puesto. Pero si se atreve a soñar, su anhelo sería “correr una temporada completa en el campeonato del mundo”. El primer paso está dado ya. “Hay pasos grandes y otros pequeños, algunos incluso se retrocede, pero este deporte es así. Es un sube y baja constante”, reconoce.

Me gustaría poder correr una temporada completa en el campeonato del mundo

Tras tantos esfuerzos y sacrificios desde que tenía 13 años, su mayor recompensa llegó en el Gran Premio de Francia, y eso que su mudanza al KTM SB Racing alemán era muy reciente: “Los objetivos que me marco son altos y siempre pienso que voy a conseguirlos, por lo que me esperaba hacer podio este año”. Y ya lo ha logrado. “Realmente ha sido una temporada complicada para mí porque estaba en otro equipo pero no salió bien y tuve que cambiar hace unos dos meses y me costó llevarlo. Además, estuve corriendo en Madrid también una carrera del Mundial y fue muy bien, llegando a estar en sexta posición, pero me hice daño en la mano”, explica.

Pese a todo, fue una experiencia irrepetible. “Verme allí la verdad es que me gustó y la idea es seguir así en el Europeo, a poder ser ganar una carrera, y hacer este año todas las que pueda del Mundial de MX2 (categoría por la que han pasado también el lucense Jorge Prado y el vigués Rubén Fernández), porque la idea es hacer toda la temporada completa el año que viene”, asegura.

“No va a ser fácil, sobre todo porque a veces piensas que estás cerca de un objetivo y al final tarda más de lo que esperas”, afirma, pero por intentarlo no va a ser. A partir de ahora, entre citas del Europeo, del Mundial y del campeonato alemán tendrá carreras “todos los fines de semana hasta noviembre”.

Así que el circuito de Ernée será para él uno de esos trazados que marcarán un antes y un después en su carrera deportiva. “En el podio me di cuenta de que lo que he logrado es la recompensa a un trabajo que llevo haciendo toda mi vida, desde que era pequeño y se siente muy bien, la verdad”. “Esta fecha te queda marcada y espero que sea el primero de muchos”, ansía.

“Me he dejado el alma en el camino, pero valió la pena”, decía el piloto tras bajarse del podio en su cuenta de Instagram. “Esto es solo el principio”, anunciaba, al tiempo que daba las gracias “a cada una de las personas que confiaron en mí algún día”. Personas a las que no está dispuesto a defraudar porque el porriñés ha encontrado la senda del triunfo y aunque asume que “no se puede ganar siempre”, nunca desperdiciará las oportunidades que se le pongan por delante para intentarlo. Sus sueños no tienen fronteras.