El Coruxo logró cambiar la dinámica de la última jornada del campeonato, y llegará a la misma dependiendo de sí mismo para lograr la clasificación para la fase de ascenso a Primera RFEF. El objetivo no es otro que sumar los tres puntos en juego, el domingo a las 12 horas en O Vao ante la Gimnástica. Un triunfo clasifica a los vigueses. Otro resultado implica a estar pendientes de otros campos.

Las complicadas dimensiones del Pepe Quimarán llevaron a Jacobo Montes a buscar un “once” que, por un lado, controlara el centro del campo para abrir el juego por las bandas y, por otro, evitar el juego aéreo de los asturianos, más acostumbrados a meter balones al área. Y así llegó el primer gol de la mañana, un balón al área y una salida de Alberto que no consigue atajar el balón, permite que Víctor toque lo mínimo el esférico de cabeza, para marcar. Cinco minutos, y al Coruxo ya le tocaba remontar un marcador adverso.

A pesar del duro golpe, el equipo entrenado por Jacobo Montes fue capaz de reaccionar con rapidez. Habían pasado dos minutos desde el tanto asturiano, cuando Mateo Míguez conectó un potente disparo desde fuera del área, ante el que nada pudo hacer el guardameta local.

Chiqui recupera el balón ante Vity, durante el partido que el Coruxo jugó ante el Llanera. // IRMA COLLIN

Quedaba mucho tiempo por delante, y el Coruxo sabía que no debía precipitarse, por lo que continuó con su plan de hacerse con el control del centro del campo y presionando la salida de balón del Llanera. Chiqui confirmó su buen momento de juego, subiendo con velocidad por la banda para crear peligro,. Sin embargo, no fue hasta que faltaban cuatro minutos para la conclusión, cuando una de sus subidas tuvo recompensa. El interior dejó a su rival atrás y disparó con fuerza, pero Martín no fue capaz de agarrarlo, y esperando con la caña estaba Mateo, que solo tuvo que empujar el balón.

Como era de esperar, el Llanera dio un paso al frente tras el paso por el vestuario. Una situación que estaban esperando los vigueses pues un robo le permitió a Chiqui volver a meter la directa y encarar a Martín, al que batió colocándole el balón en el segundo palo.

El partido estaba encarrilado, y lo más importante, controlado, ya que el Llanera no era capaz de encontrar un hueco por el que llegar con peligro a las inmediaciones de Alberto. Además, las noticias que llegaban desde otros campos eran propicios, con lo que había que administrar lo que restaba de encuentro. El infortunio hizo que Lucas marcara en propia puerta, pero en el momento en el que Coruxo se estiró, aprovechó un hueco para que Aarón se plantara en la portería asturiana, y Martín lo derribara. Manu se encargó de marcar, y certificar la victoria que le permite al equipo depender de sí mismo.

Ficha técnica

UD Llanera: Martin, Marcos Manuel, Pantiga, Pape Assane (Martin, 59´), Javi Sánchez (Dani, 65´), Matias, Sampedro (Amadou Matar, 59´), Víctor, Espinar, Okoubi y Hugo.

Coruxo FC: Alberto, Antonini, Dani, Terranova, Aspas (Manu, 77´), Anton, Silva (Borja, 77´), Mateo (Gandoy, 54´), Jacobo, Fernández y Chiqui (Aarón, 68´).

GOLES: 1-0 (5´) Víctor. 1-1 (7´) Mateo. 1-2 (41´) Mateo. 1-3 (50´) Chiqui. 2-3 (69´) Fernández (pp). 2-4 (90´) Manu (p).

ÁRBITRO: Diego Bolado Palencia (colegio cántabro. Tarjetas amarillas a Mbodji, Arango Alonso, Sampedro Bernardo, Pantiga Sariego, Mapisa, Silva Carrera y Domingo.

CAMPO: Municipal Pepe Quimarán.

“Tenemos que conseguir que O Vao sea clave”

El técnico del Coruxo apuntaba tras la victoria ante el Llanera, que “ahora dependemos de nosotros mismos, y si el domingo le ganamos a la Gimnástica estamos en la fase de ascenso. No va a ser un partido fácil, ya que la Segoviana necesita un punto para salvarse matemáticamente.Tenemos que conseguir que el campo de O Vao vuelva a ser un campo clave”.

El domingo, a las doce en O Vao

La última jornada del campeonato volverá a tener horario unificado, domingo a las 12 horas. Está claro que el Coruxo no tiene que ver para otros campos y deberá centrarse en derrotar a la Gimnástica, pero no es menor cierto que hay partidos comprometidos, como el Palencia-Pontevedra o el Arosa-Bergantiños.