El ciclista esloveno Tadej Pogacar se impuso de forma majestuosa en la Strade-Bianche, en la que atacó a falta de 50 kilómetros para la meta y sacó una ventaja de más de medio minuto a Alejandro Valverde, que finalizó en segunda posición tras una brillante actuación en la región italiana de la Toscana.

Pogacar impuso su ley en tierras italianas. La clásica transalpina se presentaba como una cita importante para Pogacar y el francés Julian Alaphilippe ante las grandes ausencias del neerlandés Mathieu Van der Poel y el belga Wout Van Aert, pero el francés, bicampeón del mundo, cruzó en último lugar la línea de meta tras una carrera en la que sufrió un temprano accidente que le condicionó el recorrido.

Pogacar no tuvo rival y no flaqueó en ningún momento desde su ataque. Cada pedaleada le alejaba del pelotón y confirmaba su gran estado de forma. El doble campeón del ‘Tour’ quería inscribir su nombre en esta clásica de la Toscana y no paró hasta conseguirlo. El español Carlos Rodríguez, en cambio, se sumó al ataque de Pogacar en busca de una recompensa en forma de podio que a la postre no llegó (19º), pues el pelotón le alcanzó a falta de 24 km. Ante el paseo de Pogacar la duda estaba en el segundo puesto que fue para un espectacular Alejandro Valverde.