El Areosa ha sido sancionado con una multa económica por los incidentes de público que se produjeron en los minutos finales del partido de la Liga Nacional Juvenil entre su equipo y el del Racing de Ferrol. El órgano disciplinario considera probado que en la discusión, que incluyó insultos y empellones, participaron aficionados identificados de manera fehaciente como locales. El juez ha tenido en cuenta como atenuante que es el primer incidente en el que el club vigués se ha visto involucrado esta temporada.

El partido en A Xunqueira había entrado en el tiempo de prolongación. El equipo local había recortado distancias, poniéndose 2-3 gracias a un gol de Abraham Coello en el minuto 90. En el 91 la árbitra Zulema González expulsó al visitante Isaac González al mostrarle la segunda amarilla. Cuando se dirigía al vestuario, la madre de un jugador local le increpó y empujó. Cuando el racinguista se revolvió, más padres y aficionados llegaron a la zona.

Otro racinguista, Lamigueiro, se vio envuelto en la trifulca, a la que se fueron sumando otros jugadores y espectadores, mientras miembros de Protección Civil intentaban frenar lo que sucedía. Zulema González detuvo el partido y requirió la presencia polical. Los minutos restantes se disputaron cuando ya el ambiente se había tranquilizado.

La directiva del Areosa emitió ayer un comunicado sobre “los penosos y lamentables” incidentes, que condenan “enérgicamente”. Desde el club recuerdan su filosofía pedagógica. En su relato mencionan a padres “de uno y otro equipo”. Matizan que la mayoría de jugadores se acercaron con ánimo de separar a los que se habían enzarzado en la tangana. El delegado y el presidente del Areosa, presentes en el campo, colaboraron con el trío arbitral, Protección Civil y Policía. El club anuncia, finalmente, que estudiará “las medidas a adoptar en relación con los jugadores y padres que tuvieron participación en tan lamentables hechos”.