Qatar admitirá en el Mundial de fútbol que acogerá dentro de un año a los aficionados LGTBI... mientras no demuestren en público su condición sexual. Esa es la cruda y despreciable conclusión de las declaraciones efectuadas por el presidente del comité organizador del torneo, Nasser Al Khater, en una entrevista con la CNN.

Preguntado acerca del miedo a acudir a Qatar que manifestó Josh Cavallo, el futbolista australiano que hace unas semanas hizo pública su homosexualidad, Al Khater declaró a la televisión inglesa que no tenía nada que temer, puesto que su país es "tolerante y acogedor". "Es bienvenido en Qatar y le invito a venir también antes del Mundial", ha asegurado, garantizando la seguridad de los aficionados, sea cual sea su condición sexual.

"Nadie se siente amenazado ni inseguro en Qatar", ha añadido, negándose a reconocer que la homosexualidad sea delito en el país, pese a que está penada con hasta tres años de cárcel, ciñendo la diferencia con otros países a que el matrimonio entre personas del mismo sexo no ha sido legalizado.

"Pudorosos"

Sin embargo, repreguntado por la periodista, apuntó a que en otros países existe "una mayor tolerancia hacia las muestras públicas de afecto" entre personas del colectivo LGTBI: "En Qatar y en toda la región somos mucho más pudorosos y conservadores. Por eso pedimos respeto a los aficionados y estamos seguros de que respetarán esta cuestión. Nosotros respetamos otras culturas y confiamos en que otras culturas respeten la nuestra".

Esta polémica se suma a la que existe desde hace años con la situación de las personas migrantes que trabajan en Qatar para construir los estadios en los que se disputará el Mundial, en el que España tiene ya su presencia garantizada, al igual que otras selecciones punteras como Francia, Alemania, Brasil, Argentina...

"Prácticas abusivas"

Hace apenas un par de semanas, Amnistía Internacional denunció que Qatar tiene "paralizados" los cambios que había prometido sobre su sistema laboral, mientras las "viejas prácticas abusivas" contra la mano de obra migrante resurgen a solo un año de que se celebre el torneo.

"Qatar se está quedando sin tiempo", advirtió la organización de acuerdo a los resultados del informe Reality Check 2021, que alerta sobre el incumplimiento del país de su "promesa" de abolir el sistema kafala (la legislación laboral basada en el patrocinio) y mejorar la protección de los trabajadores migrantes, según informó Europa Press.