Segunda derrota consecutiva del Ganomagoga, que no duele en exceso. El histórico Santiago, tantos años en División de Honor como Lobelle, campeón de Copa, Supercopa y Supercopa de Europa, conserva el potencial suficiente en su declive para liderar el grupo 1 de Segunda B con pleno de cinco triunfos. Al Ganomagoga, en mitad de la tabla en su campaña de estreno en la categoría, le hieren más las palabras: las de José Carlos Martín, Chipi, técnico de la escuadra capitalina. El duelo se tuvo que detener durante varios minutos. La pareja arbitral requirió la presencia policial. Chipi habla de un clima bélico que desde el club vigués niegan. Critican, en cambio, su actitud “provocativa”, con gestos hacia la grada, y pedirán para él una sanción disciplinaria.

El partido se disputó en As Roteas al estar el Central de As Travesas ocupado. El Santiago remontó el tanto inicial del Ganomagoga y se impuso por 3-4. El pabellón se llenó, con presencia incluida de seguidores visitantes, sin fricciones entre ambas hinchadas.

La emoción devino en acaloramiento a falta de 17 minutos para el final. El local Alberto se golpeó en la cabeza –no pudo, de hecho, continuar, aunque se encuentra bien–. Los árbitros no detuvieron el juego y el contragolpe del Santiago concluyó con disparo al palo. Los ánimos se encresparon. Borja Moreira y Manuel Dans constatan en el acta que mientras el juego estaba detenido “por una confrontación de ambos equipos, un espectador que se encontraba en la grada accede a las inmediaciones de la superficie de juego, situándose al lado de la mesa del árbitro asistente, no pudiendo ser identificado posteriormente. Dicho espectador regresa a la grada”. Responsables del Ganomagoga intentaron localizar quién era, pero seguramente abandonó el pabellón de inmediato.

Los árbitros también describen que “al mismo tiempo, varios espectadores situados detrás del banquillo increpan de forma ostensible a dicho banquillo. Ante tales hechos, se requiere la presencia de la fuerza pública, teniendo que estar el partido detenido durante 19 minutos”. Árbitros y equipos esperaron la llegada de la policía en los vestuarios, tras lo cual el partido se reanudó “sin mayor incidencia”.

Extracto del acta arbitral que relata lo sucedido.

En el Ganomagoga concuerdan con esta versión arbitral de lo sucedido. Y lamentan la ofrecida por Chipi en diversos medios de comunicación santiagueses como El Correo Gallego, en el que el entrenador afirma: “El partido no lo he visto, no un partido de fútbol sala. Vi una película de boxeo, de ‘kick-boxing’. Ya no sé. El deporte ya no transmite valores a la sociedad, estoy obcecado con lo que ha pasado”. Añade: “Cada vez van a llegar más jugadores de 1,90 metros, que chocan y pelean, y menos con talento”, en referencia a un jugador vigués. En la crónica se asegura que “los aficionados abandonaron la grada e invadieron la pista”.

El Ganomagoga ha publicado un comunicado en el que felicita a la pareja arbitral (“ni una sola crítica ni un reproche”) y proclama por el Santiago Futsal su “profunda admiración y respeto”. Acto seguido, lamenta que “la única persona que ha sido expulsada durante el encuentro hable de ‘película de boxeo’, ‘agresividad’, ‘invasión de campo’ y un largo etc que perturba y daña la imagen de esta institución de forma irreparable”. La mención es directa a Chipi, que fue expulsado en el minuto 35 por doble amonestación. El club olívico espera que Competición actúe de oficio por esas declaraciones y en caso contrario, se plantea denunciarlo.