Una vez rota en Granada la inercia de un mal arranque, el Celta Zorka Recalvi vuelve al pabellón de Navia con el objetivo de ofrecerle a su afición la primera victoria, segunda de la temporada. Será en un día especial. El acceso de aficionados al pabellón de Navia alcanza casi niveles de antes de la pandemia, con casi 1.200 aficionados autorizados. El club espera una buena respuesta de aficionados, aprovechando el día festivo. Un apoyo que se ha demostrado en los partidos disputados que es muy importante, pues la igualdad en el grupo es muy grande y cualquier mínima ventaja puede jugar un papel determinante.

El equipo entrenado por Cristina Cantero tendrá enfrenta a un Al-Qázeres que también viene de lograr su primera victoria en el campeonato tras vencer al Joventut en su pabellón por 72-46. Tanto viguesas como extremeñas ocupan la zona media de la clasificación, igualadas a victorias y casi con los mismos números –un punto más anotado y cuatro menos encajados por el Al-Qázeres–.

Las viguesas entrenaron con absoluta normalidad tras su regreso de Granada, en donde la semana pasada derrotaron al Raca. Cristina Cantero mantiene la baja de Celia García, que comienza a entrar en el grupo con sus compañeras en determinados momentos. “Mientras no haga una semana de trabajo con sus compañeras no estará en condiciones de reaparecer”, advierte Cantero. El resto de jugadoras está en perfectas condiciones.

Un partido que para Cantero “como todos los partidos que estamos viendo, va a ser muy complicado. Ellas vienen de la máxima categoría y han conseguido formar un equipo muy competitivo. Se han reforzado con un buen “5” como es Yaiza Lázaro, que tiene un buen tiro de media distancia y sabe ganar las posiciones. También han fichado a dos exteriores como la base Patricia Vicente, que estuvo con nosotras, y Satorre. Son jugadoras muy eléctricas, rápidas en el uno contra uno y a campo abierto hacen muchísimo daño. En estos momentos su máxima referencia es Mollenhauer, una tres americana que puede jugar de cuatro. Jugadora de gran tamaño con una buena mano, viene enganchando casi 20 puntos de media y genera muchos espacios para las demás”.

Sobre lo que espera del encuentro, la entrenadora viguesa indica: “Deberemos ser capaces de imponer nuestro estilo de juego, nuestro ritmo, no solo jugar a lo que quieran ellas a nivel de campo abierto, sino ser capaces de imponernos desde nuestra defensa y en rebote. Ellas tienen bastante capacidad para entrar al rebote con Primm y Lázaro, además de contar con Sara Zaragoza, que es una pívot muy alta, de 1.96. Por ahí tienen mucho tamaño, por lo que nosotras deberemos compensar ese peso con mucho trabajo. Vamos con muchas ganas de enganchar la primera en casa, ahora que nos dejan meter mucha gente. A ver si se genera un gran ambiente y si somos capaces de darle el primer triunfo a los nuestros”.