Mecalia Atlético Guardés (14+12)
Carratú (p.), Míriam Sempere (p.); Sandra Santiago (1), Nazaret Calzado, Lore Pérez (2), Ángela Nieto (2), Descalzo (2), Lima (2), Arcos (2), Carla Gómez (2), Sancha (5), Pessoa (3), Daniela Moreno (5), y Yaiza Alonso.
KH7 Granollers (15+9)
Nicole Wiggins (p.) (1), Marta Mera (p.); Ben Chayhab (1), Moragues, Elene Vázquez, Sarandeva (1), María Monllor, Giulia Guarieiro (7), Ona Vegué (4), Carmen Prelchi (2), Carolline Dias (1), Ana González (1), Jana Castañera (3), Yumi Tamada y Martina Capdevila (3).
Parciales cada 5 minutos: 2-0, 6-3, 9-5, 10-8, 11-11, 14-15 (descanso); 15-16, 19-17, 21-17, 21-18, 22-21, 26-24 (final).
Árbitros: Árbitros: Alejandro Hoz y Axel Riloba (Cantabria). Excluyeron dos minutos a las jugadoras locales Nazaret Calzado y Pessoa y a las visitantes Carolline Dias (2) y Carmen Prelchi. También excluyó con dos minutos al entrenador local José Ignacio Prades.
Incidencias: Partido de la cuarta jornada de la Liga Guerreras Iberdrola disputado en el Pabellón de A Sangriña.
El Mecalia Guardés siempre da una vuelta de tuerca a su rendimiento cuando juega en A Sangriña. El equipo de O Baixo Miño derrotó al KH7 Granollers en un fantástico partido de ambos conjuntos, que jugaron a fogonazos, con electricidad permanente e intensidad latente. En esa montaña rusa de alternativas la escuadra de Prades aprovechó la gasolina súper de su pabellón casi a pleno rendimiento.
Así es A Sangriña. Una lanza cuando vas cuesta abajo y un paraguas cuando llueve. Y en el encuentro frente al conjunto vallesano hubo de todo. Porque el Guardés salió en tromba. Un 6:0 muy profundo y agresivo permitió a las pupilas de Prades correr mucho y establecer un parcial de 5-1, con Daniela Moreno exhibiendo su estado de gracia. Pero el letargo del Granollers duró poco. Tras un tiempo muerto prematuro de Salva Puig, el conjunto catalán se activó en defensa y devolvió la moneda con un parcial de 1-4 .
En el tramo final, María Sancha reactivó al Guardés. Sin embargo, el Granollers no se amilanó, aguantó el tipo e incluso se fue por delante al descanso gracias a una gran maniobra de Prelchi, que acabó en un penalti que transformó Guarieiro (14-15). Las protestas de Prades le costaron su exclusión.
Míriam Sempere mantuvo al Guardés en el partido en su peor momento, con Granollers atacando para coger tres goles de renta. Las paradas de la portera alicantina serenaron a su ataque. Fue el momento del factor Arcos. La petrerí apareció para tirar del equipo guardés. Poco a poco, las tornas cambiaron y el Guardés adquirió rentas de cuatro goles que presagiaban un final tranquilo. Error. Una batalla así no podía acabar sin brega. El Granollers pasó a atacar con siete y a defender en doble mixta sobre Lima y Arcos para ponerse a dos tantos. Sancha, con su velocidad y clarividencia, ayudó a sellar un triunfo coral.