La Federación Gallega ha decidido que la Preferente Sur finalice en el campo y no solucionar la temporada con una decisión salomónica. Una decisión que tiene un claro perjudicado: el Gran Peña. Un mes después de la fecha inicialmente prevista (debería haberse disputado el 26 de junio) la última jornada de la fase de ascenso se jugará este domingo y por fin se conocerán los nombres de los dos equipos que ascienden a Tercera Federación. Durante este tiempo se han sucedido los aplazamientos por la incidencia que el COVID ha tenido en los diferentes equipos hasta llegar a la fecha marcada como tope por la Federación Española de Fútbol que ha instado a la Gallega a comunicarle el nombre de los dos equipos que entran en la Tercera Federación.

Lo llamativo es que esta última jornada se va a celebrar con una incidencia de positivos superior a la registrada a finales del mes de junio cuando se suspendió la jornada. Una situación que afecta especialmente a uno de los equipos implicados en la pelea por el ascenso, el Gran Peña. El club vigués dice sentirse “atropellado” por la decisión y acusa a la Federación Gallega de mentir en sus comunicados. Según el organismo en el Gran Peña hay actualmente dos positivos por COVID pero que no hay mayor riesgo proque “no se entiende que haya existido contacto estrecho con el resto de la plantilla al tener este club la actividad deportiva colectiva suspendida ni constando tampoco orden de aislamiento domiciliario por parte del Sergas”. Según la Federación Gallega el Gran Peña tiene inscritos en su plantilla a 24 futbolistas y que “únicamente” hay 9 no disponibles para este partido por lo que puede cumplir con el compromiso ante el Juvenil.

Esta versión dista mucho de la que ofrecen desde el Gran Peña donde tanto su directiva como los jugadores mediante un comunicado aseguran tener siete positivos, otros cuatro aislados por contacto estrecho y luego un puñado de futbolistas que no pueden jugar porque se encuentran fuera por cuestiones personales. Los jugadores del Gran Peña aseguran que pese a comunicarle a la Federación Gallega esta situación se les obliga a jugar y que incluso han sido “amenazados con un descenso administrativo en caso de que no presentarnos al partido, sin importarles la situación sanitaria ni la salud de los jugadores”. Desde el Gran Peña matizan que la Federación obvia que, pese a no entrenar en las últimas semanas, muchos jugadores están en contacto por la relación personal que les une y que ese detalle no ha sido tenido en cuenta.

El Gran Peña, que la próxima temporada ya será filial del Celta, insiste en que pretenden estar en Ponteareas para medirse al Juvenil aunque están convencidos de que no podrán hacerlo con los jugadores suficientes y que no se les permite pelear en condiciones por el objetivo que llevan persiguiendo desde que comenzó la temporada. Pero la Federación Gallega quiere acabar en el campo, algo que desde el Gran Peña entienden que se hace para satisfacer los intereses de alguno de los implicados en la pelea por un ascenso al que aspiran ahora mismo cinco equipos: Juvenil, Gran Peña, Barbadás, Arnoia y Villalonga.