El monegasco Charles Leclerc (Ferrari) saldrá primero en el Gran Premio de Azerbaiyán, sexto del Mundial de F1, tras dominar la muy accidentada calificación en la pista urbana de Bakú, donde los españoles Carlos Sainz (Ferrari) y Fernando Alonso (Alpine) saldrán quinto y octavo, respectivamente; y el mexicano Sergio Pérez (Red Bull), sexto; tras beneficiarse los dos últimos de la sanción impuesta al inglés Lando Norris (McLaren).

Leclerc, de 23 años, firmó ayer sábado la novena “pole” de su carrera en Fórmula Uno, la segunda consecutiva, al cubrir los 6.003 metros de la pista de Bakú en un minuto, 41 segundos y 218 milésimas, 232 menos que el séptuple campeón del mundo inglés Lewis Hamilton (Mercedes), que saldrá segundo, por delante del holandés Max Verstappen (Red Bull), líder del Mundial, con cuatro puntos de ventaja sobre el británico.

La calificación fue realmente loca y estuvo interrumpida con cuatro banderas rojas. Dos de ellas en el primer acto.

El canadiense Lance Stroll (Aston Martin) y el italiano Antonio Giovinazzi (Alfa Romeo) provocaron sendos parones en la primera ronda, en la que, obviamente, quedaron eliminados. Hamilton ya avisaba con el mejor tiempo de la ronda, por delante de Verstappen; con “Checo” Pérez y Sainz marcando tercer y cuarto crono, respectivamente; y Alonso, el decimoquinto.

Tanto Stroll (a falta de 14 minutos), como Giovinazzi (cuando quedaban seis para el final de la ronda) perdieron el control de sus monoplazas en la decimoquinta de las 20 curvas de la pista.

En la Q2 se ondeó la tercera bandera roja del día, la que provocó el australiano Daniel Ricciardo (McLaren), esta vez en la curva 3. El “aussie” se accidentó a falta de minuto y medio, por lo que ya no se volvió a reanudar una ronda en la que Verstappen fue el más veloz, por delante de “Checo”; con Hamilton tercero, Sainz sexto y Alonso, décimo.

En la decisiva Q3, Hamilton se aprovechó del rebufo de Bottas; y Leclerc del que le prestó el siete veces campeón mundial inglés. Y ambos se beneficiaron a su vez de la cuarta bandera roja, que anticipó el final de la calificación, a falta de algo más de un minuto. Que provocó el japonés Yuki Tsunoda al perder el control y chocar de nuevo en la tercera curva.

Tsunoda le acabó arruinando el día a Sainz, que bloqueó justo antes de la escapatoria y acabó dándose un toque, antes de afirmar que “ya van dos situaciones seguidas muy comprometedoras y difíciles de aceptar”.

El talentoso piloto madrileño arrancará quinto, en la tercera fila, que iba a compartir inicialmente con su ex compañero inglés Lando Norris (McLaren), sancionado por su actuación durante una de las banderas rojas de la Q1 con la perdida de tres plazas-. Cuyo espacio ocupará finalmente “Checo”.

El mexicano también pudo haber acabado, no obstante, mucho mejor. Primero bloqueó, en la ronda decisiva, en la cuarta curva de su primer intentó; y se vio perjudicado por la bandera roja provocada por Tsunoda.

La penalización del joven piloto inglés, tercero en el Mundial, también benefició a Alonso, que avanzó un puesto, pero que también hubiese merecido mejor suerte. El doble campeón mundial asturiano, que cada vez que instalaba neumáticos nuevos se encontraba con una bandera roja, se marchó con la sensación de que podía haber acabado “al menos, séptimo u octavo” la calificación.

Al final, Fernando se conformó con el octavo puesto, al ganar uno por la sanción a Norris; y saldrá desde la cuarta fila, al lado del japonés de Alpha Tauri. Que no deja de ser, al fin y al cabo, su mejor posición en parrilla en Azerbaiyán.