El Real Madrid metió presión al Atlético de Madrid, que se enfrenta esta tarde al Huesca, con un triunfo incontestable en el Ramón de Carranza ante un Cádiz superado en una primera parte en la que recibió tres tantos, dos con la firma de Karim Benzema y un gol de Álvaro Odriozola, antes de guardar fuerzas. Los de Zidane cerraron el día como líder igualados a puntos con los colchoneros y con cinco puntos de ventaja sobre un Barcelona que aún tiene dos partidos menos jugados (esta noche jugará uno de ellos). En pleno terremoto de la Superliga, el Real Madrid visitó uno de esos campos donde se presentan partidos desiguales pero que exigen entrega para ganarlos. La plaga de bajas madridistas costaron un empate en la dificultad en Getafe que no tuvo consecuencias en el Carranza. Los de Zidane no encontraron rival. Pese a jugar con una identidad diferente, con Benzema les sobra para volver a la pelea por el título.

Se levantó el equipo de Zinedine Zidane del empate en Getafe, superando en esta ocasión la plaga de bajas que sufre, gracias a una primera mitad repleta de firmeza. Después de 25 jornadas sin disponer de un penalti, un pisotón de Iza sobre Vinicius permitió a Benzema romper el partido a la media hora.

En diez minutos el Real Madrid se desató con tres tantos, siempre con la participación de Benzema. El francés asistió a Odriozola, que firmó el segundo de cabeza, y de la misma manera marcó el tercero el 9 blanco. El Cádiz pensó en partidos decisivos que le llegan en la segunda parte y los de Zidane optaron por guardar fuerzas con una noticia positiva para sus intereses, la reaparición de Dani Carvajal. Pero el partido resultó muy plácido para los blancos que perdonaron una goleada aún más concluyente de un equipo que recuperó el resuello.