El Atlético de Madrid defendió su liderato tras imponerse de forma clara por 5-0 a la SD Eibar, gracias en buena parte al acierto de Ángel Correa, autor de dos goles claves y psicológicos en los cinco últimos minutos de la primera parte que desenredaron a líder hasta entonces algo espeso nuevamente.

El conjunto de Diego Pablo Simeone salió del túnel en el que parecía metido y que había apretado la carrera liguera. Lo hizo con más contundencia que apoyado en un fútbol brillante, y gracias a la aparición del delantero argentino, que se redimió de sus dos ocasiones falladas el pasado domingo ante el Betis y que hizo venirse abajo a los ‘armeros’, desarbolados en la segunda mitad.

El ‘10’ rojiblanco cambió las lágrimas por su sonrisa y aunque el partido terminó con goleada, nadie la atisbaba en el minuto 42. Hasta ese momento, el líder no había estado fino para desarmar a un Eibar que había aguantado hasta entonces con bastante solvencia, pero que se marchó otra jornada de vacío, ya la decimocuarta consecutiva. Once minutos fatales, con el descanso de por medio, fueron una losa para el colista y un impulso para los colchoneros.

Así, en el minuto 42, un saque de esquina fue cabeceado por Herrera en el primer palo hacia el segundo donde estaba en soledad Correa para empujarlo a la red y dar alivio al líder. Dos minutos después, el argentino hacía el 2-0 tras un gran giro en el área tras un pase de Carrasco.

El Atlético llegó al descanso con la tranquilidad que necesitaba y el paso por vestuarios le devolvió con mucha más contundencia y aprovechando la debilidad visitante en defensa. Carrasco, libre de marca entre Arbilla y Burgos, no desperdició un buen pase al espacio para desbordar a Dimitrovic, aguantar la llegada de Dufur y empujar a puerta vacía el 3-0. Llorente se sumó luego a la golada por un par de tantos.