Un penalti detenido por el meta del Granada, Rui Silva, en el minuto 92 a lanzamiento de Paco Alcácer cerró con un empate a dos en La Cerámica un encuentro de alternativas, con muy pocas ocasiones pero con cuatro goles, en el que el conjunto forastero fue capaz de maniatar al Villarreal, que llevó más la iniciativa.