El deporte no es ajeno a la pandemia, pero lo que está demostrado y avalado científicamente son los beneficios que aporta como actividad saludable, emocionalmente y con efecto agitador y enriquecedor de muchos valores, a diferencia de otras muchas que se nos permite realizar al 100% o con alguna restricción en estos momentos, que no pueden decir lo mismo y chocan frontalmente en esta pandemia que sufrimos.

Con esto, lo que quiero decir, es que he asistido en primera persona a los esfuerzos titánicos de muchos clubs, de distintas modalidades deportivas, siempre en contacto permanente con las diferentes administraciones, siempre atendiendo a miles de documentos enviados con el único título de “cómo proceder en esta difícil situación”, para poder gritar la palabra DEPORTE en sus respectivos terrenos de juego.

Los números y los resultados ahí están. Por supuesto que ninguno de ellos tan importante como los que este enemigo común que tenemos llamado covid19 ha generado y sigue maltratándonos día a día.

Pero sí debe tranquilizarnos la profesionalidad de formadores y directivas, que han demostrado que pueden no solo seguir las instrucciones de manera precisa, sino que incluso mejorarlas, por eso una de las características más importantes que tienen las personas, la capacidad de adaptación, provocará que si ahora la medida deportiva es la suspensión de las competiciones autonómicas y restricciones en el día a día para los respectivos entrenamientos, tened por seguro que tenemos garantizada la continuidad metodológica de todos nuestros deportes. Porque quizá lo fácil es hacer siempre lo mismo…pero ya lo decía Einstein…”si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo”, y como en muchos otros ámbitos hay decisiones que no podemos manejar, pero sí adaptarnos nosotros, a los nuestros y a nuestro método.

*Coordinador Deportivo Vigo 2015