Arrancó la segunda vuelta de la primera fase, con un derbi entre Rápido de Bouzas y Choco que fue un calco a lo que sucedió en la primera vuelta, aunque al revés. En aquella ocasión se adelantó el Rápido, que acabó perdiendo, y ayer marcó primero el Choco, llevándose la victoria el Rápido. Un triunfo que vale su peso en oro, pues el equipo entrenado por David de Dios ya está solamente a un punto de la zona que evita la fase por la permanencia.

No obstante, el Rápido deberá analizar fríamente lo que ayer sucedió en el Baltasar Pujales. Y es que los aurinegros tiraron los primeros cuarenta y cinco minutos de juego. Un primer tiempo en donde el equipo estuvo muy metido atrás, le dejó el balón al Choco, y solamente salía de su área cuando veía una buena oportunidad para salir a la contra. De hecho, en los primeros cuarenta y cinco minutos no dispararon entre los tres palos ni una sola vez, y así es muy complicado ganar un partido, sobre todo cuando juegas en tu casa.

A pesar de las dificultades que le ofreció el Rápido, el Choco tampoco es que estuviera mucho mejor. Evidentemente tuvieron la posesión del balón, dominaron y controlaron el centro del campo, pero tampoco consiguieron poner en apuros a Rui. En los primeros cuarenta y cinco minutos de juego, solamente dispusieron de una clara ocasión. Clarísima, más bien, pues David remató de cabeza solo, dentro del área pequeña, haciendo lo más difícil, echarla fuera. Fue lo único destable de los primeros cuarenta y cinco minutos.

En el tiempo de descanso, David de Dios le debió leer la cartilla a los jugadores. La actitud fue otra diferente, presionando la salida de balón del rival, moviendo el esférico por la bandas. En resumen, actitud para ganar. Pero como esto es fútbol, la actitud no llega, y en la primera ocasión que el Choco llega al área de los aurinegros, Félix dispara ajustado al palo y el balón se cuela en la portería de Rui.

Al Rápido se le unía ayer otro problema más, y es que David de Dios estaba en la grada cumpliendo sanción, por lo que no tenía comunicación directa con sus jugadores. En el minutos sesenta y cinco, los aurinegros hicieron el primer cambio del partido bueno, más bien tres, pues cambió toda la medular. Álex Rey, Caramés y Viti entraron por Rubén, Carlos y Canhoto, y lo cierto es que le vino bien al equipo. Nada más entrar Viti hace lo más difícil enviando el balón fuera cuando estaba solo, y en el minuto setenta y seis llega el empate, en una desafortunada acción de Cortegoso, que no bloquea el balón doblándole las manos.

El Rápido apretó buscando la igualada, mientras que el Choco daba por bueno el punto y ya no arriesgaba tanto. Con el tiempo cumplido, Jorge entra por la banda derecha y le mete el balón a Caramés, que solo tiene que empujar.