Entre el indiscutible favoritismo del Atlético, la necesidad de retomar su buen momento después de perder el derbi ante el Madrid y con un amago de penalti a los tres minutos que el VAR echó hacia atrás, parecía que los de Simeone iban a recuperar el liderato con un paseo militar. No fue así, el partido de los ilicitanos fue serio y puso en problemas a un Atlético con un juego tosco y sin imaginación. Dos goles de Luis Suárez al primer toque encaminaron el partido, pero el Elche recortó distancias y solo un penalti esperpéntico solucionó el final para los de Simeone, que recuperan el liderato de La Liga.

Aunque no generó casi nada más que somnolencia, el Atlético se puso por delante camino al descanso gracias a un buen centro raso lateral de Trippier, que Luis Suárez rozó lo justo para prolongar hacia el único hueco entre Édgar Badía y su defensa.

El equipo de Simeone se quitó de encima la frustración y al Elche se le escapó el fuelle, así fue hasta el segundo gol, de nuevo de Luis Suárez, de nuevo al primer toque, de nuevo dentro del área, ahora tras un pase de Carrasco.

La apariencia de que el partido estaba sentenciado llegó incluso a los jugadores de un Atlético que, víctimas de una relajación defensiva, se complicaron la vida. El Elche aprovechó su primera ocasión para marcar.

Hubo tiempo para que se fuera renqueante al banquillo Joao Félix, y para que pusiera volver a jugar Diego Costa después de un mes fuera, antes de una esperpéntica sentencia definitiva del partido. Fue con un penalti inconcebible para la época del videoarbitraje, en una acción de juego peligroso de Marcone que, vistas las repeticiones, apenas tocó la mano de Costa.