El partido del Guardés de ayer ante el Aula Alimentos de Valladolid hay que pasarlo a cámara rápida hasta el minuto 45:10. Un gol de Elena Cuadrado para el 21-20 dejaba paso a dos protagonistas: las porteras locales Míriam Sempere y Marisol Carratú. La primera, bajo palos toda la segunda parte, encadenaba acciones de mérito a las que se sumaron dos 7m atajados por la guardameta argentina y que desencadenaron que el Aula se descolocase en el partido con más de diez minutos sin anotar. El 24-20 a falta de más de cinco minutos y medio para el final ya dejó una renta insalvable para las de Peñas (26-22) que aunque pelearon hasta el final del partido acabaron sucumbiendo a un Guardés que debe los dos puntos en buena medida a sus porteras. Con este resultado, el Guardés se coloca virtualmente segundo en el Grupo A con un partido aplazado contra el Rincón Fertilidad Málaga.

El partido empezó tibio, con muchas imprecisiones para ambos equipos. Cuadrado anotó el 0-1 y el Guardés aún tardó 3 minutos en estrenarse gracias a Lima (1-1). La igualdad se aguantó hasta el minuto 5, momento en el que el Aula empezó a apretar al Guardés con un 6:0 impenetrable y Téllez por fin fue capaz de superar a Carratú bajo palos. La defensa de las de Peñas, Carmen Sanz bajo palos y la falta de atino local llevaban el marcador a un 4-6 que nada gustaba a Prades, quien pedía tiempo muerto. La brecha todavía se haría más grande, hasta el 5-8, pero poco a poco el Guardés, que se encomendó a Descalzo en seis metros y en general a cualquiera que consiguiese colarse por la zona de pivote como Lorena Pérez y Carla Gómez, empezó a despertar con los mejores minutos de Arcos sobre la pista. Aguantó un poco más el Aula, pero una parada de Sempere a Tere Álvarez y de nuevo la conexión Arcos-Lima-Gómez funcionaba para igualar el partido (13-13) hasta que Laguna, desde 7m, anotó (13-14). Arcos zanjó la primera parte con un 14-14.

La principal novedad sobre la pista en el segundo acto fue África Sempere. Hubo una prematura exclusión a Arcos que sin intención dio un golpe en la cara a Cuadrado y unos primeros minutos marcados por los errores que recordaron al inicio del partido. En esa maraña, el Guardés fue haciéndose con el partido y el Aula tuvo que esperar hasta el 38 para anotar su primer gol de la segunda parte. Hubo un 18-15 que ya parecía definitivo, pero una pájara local dio alas al Aula y el partido, con muchas alternativas, aún vivió un 19-19 que forzó el tiempo muerto de José Ignacio Prades. Hubo un tímido intercambio de goles hasta el 21-20 y la emoción se mantuvo hasta que Sempere y Carratú sentenciaron con sus paradas el partido. A las intervenciones de la alicantina se sumaron dos 7m detenidos por la argentina y el Aula dijo adiós al partido. Del 24-20 se pasó ya al definitivo 26-22 que deja alegría en el Guardés con dos puntos importantes para la segunda fase y una victoria para despedir el año 2020.