El portugués agradece el trabajo del equipo

El portugués Joao Almeida (Deceunick Quick Step), quien se aferró este domingo a su maglia rosa de líder de la general en el Giro de Italia tras el decimoquinto día de competición, reconoció que vivió "una etapa durísima" y expresó su satisfacción por conseguir sobreponerse.

Almeida entró en Piancavallo con 37 segundos de retraso con respecto al holandés Wilco Kelderman (Sunweb), segundo, pero logró salvar quince segundos de margen en la clasificación general.

"Ha sido una etapa durísima, los líderes en la subida final iban demasiado rápido para mí. Conozco mi cuerpo y mis límites, por lo que me he descolgado un poco de ellos. Estoy contento por haber salvado la maglia rosa", afirmó Almeida, en declaraciones facilitadas por los organizadores.

"Una vez más, tengo que dar las gracias a mi equipo", agregó el corredor portugués.

A 6,5 kilómetros del final, Almeida se descolgó de los líderes, el holandés Wilco Kelderman, el australiano Jai Hindley y el británico Tao Geogheghan Hart, quien finalmente triunfó, pero consiguió limitar su retraso con un tremendo esfuerzo final.

Por otro lado, el ecuatoriano Jhonathan Narváez (Ineos) se retiró ayer del Giro de Italia tras sufrir una caída en una bajada de la decimoquinta etapa junto al francés Nicolas Edet (Cofidis), según informó su equipo en una nota oficial en Twitter. "Narváez cayó en una bajada en el Giro. Está sentado y socorrido por el equipo y el cuerpo médico. Lamentablemente, el accidente ha obligado a Narváez a abandonar el Giro de este año", dice la nota del Ineos.