Una vez más vuelve la incertidumbre sobre el comienzo del grupo (de los grupos para ser más correcto) gallego de Tercera División previsto en principio para el próximo fin de semana.

Buena parte de los 24 clubes que estarán repartidos en los dos subgrupos amenazan con no arrancar el campeonato en la fecha prmetida si no se cumplen con algunos de los requisitos que han puesto a la Federación Gallega y con la que llevan tiempo negociando para encontrar las condiciones ideales para que se puedan poner en marcha las ligas.

Una vez más, como sucede en un puñado de competiciones nacionales y sucederá con las autonómicas, el principal problema pasa por los test a los que los clubes deben someter periódicamente a sus jugadores y cuerpos técnicos. La mayoría de los clubes no tienen capacidad para costearse estas pruebas y pactaron unas ayudas por parte de la Federación Gallega que no han llegado todavía.

A unos días de comenzar la Liga y ante la necesidad de realizar nuevos test, los clubes gallegos han estallado y en la última reunión mantenida con la Federación les han advertido de la posibilidad de negarse a comenzar la temporada el próximo fin de semana. En las últimas horas ultimaban la redacción de una carta a la Federación que estaban dispuestos a firmar casi una veintena de los 24 equipos que este año competirán en la Tercera División Gallega.

Muchos de los clubes ya han comenzado a realizar pruebas a sus jugadores que han corrido a cargo de su bolsillo pese a que la información que se les dio es que esas pruebas serían pagadas por Federación, CSD y los gobiernos autonómicos.

Pero las diferencias no quedan ahí porque la Federación Gallega también les apremia para que los clubes den a conocer en los próximos días la identidad del médico responsable de cada club de cumplir el protocolo anti-Covid, el delegado de protocolo y el responsable de higiene. Tres figuras a las que la Federación Española les obliga en esta situación. Los clubes reconocen sentirse desbordados por esta situación ante los problemas para encontrar esta clase de personas. En unos casos porque no tienen médicos que quieran asumir esta responsabilidad y en otros por la falta de formación para algunos de estos puestos. Los clubes piden ayuda en ambos casos a la Federación Gallega.

La directiva de Louzán ha convocado a los clubes a una nueva reunión el martes próximo en el que pretenden solucionar las diferencias y dar el visto bueno al comienzo de la temporada dentro de una semana.