Catorce clubes gallegos de balonmano, con representación cinco de ellos en División de Honor Plata femenina y doce en Primera Nacional masculina, han solicitado a la Federación Española revisar el sistema de competición de ambas categorías debido a la actual pandemia. Los clubes ya enviaron su petición a la federación el pasado 2 de septiembre, tras reunirse, y todavía no han obtenido respuesta. "Ante su silencio nos sentimos ignorados, desprotegidos y abandonados", denuncian.
En un escrito dirigido al presidente federativo Francisco Blázquez, los clubes indican su intención de no efectuar viajes de "larga distancia" establecidos en el calendario, en referencia a los que implican utilizar "medios de transporte público" o "estancia en alojamientos hoteleros". Una decisión que está justificada, a su entender, por el "riesgo a entrar en contacto con personas ajenas al equipo, el riesgo de tener que realizar una cuarentena en otra comunidad autónoma o el riesgo de transmisión del virus entre comunidades con diferente nivel de riesgo sanitario por una actividad no profesional".
Como solución a esa "preocupante" situación, sugieren que en la competición los equipos se dividan en "microgrupos" en base a su cercanía geográfica. "Una competición inicial por comunidades autónomas mientras la situación sanitaria no mejore iría en la línea de las recomendaciones sanitarias de menor movilidad entre comunidades", apuntan los clubes en su escrito.
Además, solicitan la "exención" del pago del fondo de compensación mientras no se pueda garantizar los desplazamientos entre comunidades "en un entorno de seguridad y salud" para los miembros de los equipos.
Entre los clubes firmantes figuran BM Chapela, Sociedad Atlética Redondela, Asociación Deportiva Carballal, Lavadores, CB Seis do Nadal, OAR Ciudad 1952, Luceros, Cañiza, Xiria y Ribeiro.
