Sus últimos errores llegaron en 2016, sus últimos problemas mecánicos a mediados de 2018. Lewis Hamilton se ha convertido en un piloto casi infalible. Suma 42 grandes premios consecutivos sumando? Los rivales esperan un fallo del inglés, pero nunca llega. Y menos dos veces en una carrera. Erró el hexacampeón en la primera salida del GP de la Toscana y perdió la primera posición frente a su compañero Valtteri Bottas. Una montonera en la segunda curva, y otra peligrosa colisión en cadena tras el coche de seguridad dejaron la parrilla en solo 13 monoplazas ante una nueva salida. Y ahí Hamilton se deshizo de su fallo inicial. Adelantó a Bottas y finiquitó otro gran premio con la facilidad de siempre.

Michael Schumacher -su hijo Mick rodó en la previa con el Ferrari del 2004- solía decir que se permitía "tan solo un error por temporada". Puede decirse que Hamilton solo ha cometido uno de bulto en siete años. Solo ha dejado de puntuar en ese tiempo por un par de averías en 2015 y una en 2016? Y solo dos toques importantes en seis años, cuando Rosberg le pinchó el coche en Bélgica 2014 y el accidente entre ambos en la primera vuelta del GP de España 2016.

No fue un gran fallo el de la arrancada de Mugello, pero Lewis estuvo a punto de calar el coche, suficiente para que Bottas le adelantara en un pelotón loco que acabó en una montonera. El director de carrera Michael Massi desplegó el coche de seguridad con Sainz en la decimoquinta plaza.

La reanudación resultó un desastre. El piloto del coche de seguridad apagó las luces demasiado tarde, Bottas no pudo jugar a ralentizar en las últimas curvas y lo hizo en mitad de la recta, ya que no puede haber adelantamientos hasta la línea de meta. Los coches que iban en la mitad trasera del pelotón aceleraron a fondo y se desencadenó una peligrosa colisión múltiple. "Eso es lo que pasa cuando el coche de seguridad apaga las luces demasiado tarde", se quejó Hamilton por radio. Sainz se vio envuelto en ese peligroso choque.

"Estoy contento porque no hay heridos", dijo Sainz para empezar. "Lo que ha pasado es una situación muy peligrosa. Ir a 250 por hora y ver coches parados a mitad de pista? Por fortuna solo tengo un golpe en la muñeca y en la mano", desveló, antes de explicar cómo se produjo el choque: "De la mitad de parrilla hacia atrás creíamos que la carrera se había relanzado. Fue un dominó. Yo iba a acelerando pegado al de delante para coger al rebufo? es una sensación que no le deseo a nadie, realmente peligrosa".

La carrera se detuvo con una bandera roja y Hamilton se rehizo del fallo inicial. A falta de 15 vueltas, Stroll, sufrió un reventón y su Racing Point quedó destrozado. Entró de nuevo el coche de seguridad al que siguió una bandera roja que envió a todos los coches a boxes para preparar la tercera salida desde la parrilla. Y Hamilton, claro, no falló.