Nueva jornada de vientos inestables en Kiel, con subidas y bajadas de intensidad y roles que complican el campo de regatas poniendo a prueba la capacidad de los regatistas. Bajo estas condiciones, las tripulaciones del equipo olímpico español cierran las series clasificatorias en el top 10 de las tres clases y con buenas perspectivas de cara a las series finales.

Ayer se disputaron cuatro pruebas. Támara Echegoyen y Paula Barceló (Movistar) volvieron a demostrar que saben jugar con viento y nubes para dominar una flota tan numerosa como competitiva. Los parciales acumulados hoy por las líderes de la clase 49er FX han sido de 2-1-1-13.

Támara Echegoyen no se confía: "Paula y yo estamos haciendo un buen papel en el agua, hemos estado muy concentradas y hemos sabido manejar la situación, pero hay muchos equipos con nivel. Todos estamos muy apretados y quedan regatas por delante, así que seguiremos trabajando".

Una visión refrendada por su entrenador, Víctor Payá, que mira hacia adelante con cautela: "Las chicas se han vuelto a encontrar cómodas con este campo de regatas. La última manga ha vuelto a ser la más difícil al distorsionarse el patrón de condiciones, sin que hayamos sido lo suficientemente ágiles para poder adaptarnos. Pero hay que seguir peleando porque vienen dos días muy duros, en los que se prevé viento por encima de los 20 nudos".