A la tercera fue la vencida. La SD Compostela es desde ayer el nuevo equipo gallego de Segunda División B, después de hacerse con su plaza en un disputado encuentro ante el Ourense CF celebrado en el estadio de Balaídos en el que los de Yago Iglesias llevaron el peso del partido y tuvieron casi todas las ocasiones claras de la final.

El gol del empate (1-1) en el minuto 67, un claro penalti de Cassio materializado por Pablo Antas sentenció el partido a favor del conjunto santiagués al que, de acuerdo con las directrices dictadas por la Federación Galega de Fútbol le bastaba el empate para lograr el ascenso, al haber finalizado la fase regular en el primer puesto.

Los ourensanos llegaron al partico con ganas, después de haberse codeado de "tú a tú" con el Compostela a lo largo de toda la temporada y terminar segundos en la clasificación a tan sólo un punto de los de Yago Iglesias. Los del Ourense CF comenzaron dominando el primer cuarto con un juego intenso y superior en todas las acciones que se culminó en el minuto 13 con el gol de Adri Castro de remate de cabeza tras centro de Murilo en una jugada iniciada por Sergio Barcia. Tras el tanto, la salida ambiciosa de los jugadores de Fran Justo tratando de presionar arriba con Adri Castro, Pibe y Lamelas dio paso a un Ourense CF metido atrás, con los 11 jugadores en apenas 40 metros. El Compostela comenzó a dominar el partido a partir del minuto 20 y a partir de aquí al Ourense CF le tocó sufrir.

A lo largo del primer tiempo, los pontinos lograron contener sin demasiados agobios a un Compostela que tuvo el dominio de la posesión desde el ecuadro de la primera parte pero cuyas dos mejor opciones en este tiempo fueron a balón parado. Los primeros 45 minutos dejaron patentes el buen trabajo del técnico pontino, Fran Justo, en el diseño del partido con alternativas que dejaron ver a un Ourense CF yéndose muy arriba con un grandísimo trabajo sobre la linea defensiva poniéndoselo difícil al Compostela.

Cambian las tornas a favor de la SD Compostela a partir del minuto 40, con un balón muerto en el área, disparo de Hugo Sanmartín, que finalmente no se materializa tras dar en las piernas de Portela. Un minuto después llega la primera gran oportunidad para el Compos. Bicho encontró a Miki al espacio, quien entró en el área y buscó el pase de la muerte para Primo, pero el guardameta pontino consiguió salvar el balón con la mano.

Un Compostela mejorado

El paso por los vestuarios dejó ver sobre el campo una versión mejorada de la SD Compostela, más parecida a la que acostumbran los de Yago Iglesias. En el minuto 54 llegó una doble ocasión para los santiagueses. Primero Samu encontró un paradón tremendo de Parra a su disparo duro desde dentro del área. Desde la esquina, Pablo Antas no fue capaz de imprimirle la fuerza al balón muerto que le cayó. En el minuto 63, nuevo susto para el Ourense a causa de un gol anulado a Primo por un fuera de juego milimétrico.

A punto de terminar el encuentro, el Compos tuvo la oportunidad de marca un segundo tanto que finalmente no llegó, después de que Pablo Antas, solo en el punto de penalti, armase un disparo que Parra consiguió sacar de milagro con los pies. En el minuto 94, un gol anulado de Gabri Palmás porque el balón salió por el lateral fsupuso la última jugada de un encuentro que se saldó con la correspondiente celebración por todo lo alto de la SD Compostela en los vestuarios.