El Monte Real Club de Yates presentó una nueva edición de su competición con más solera, el Conde de Gondomar, que en este 2020 cumple 45 años celebrándose de forma ininterrumpida. La gran cita comenzará este viernes.

"Pocas competiciones han podido cumplir 45 años de celebración haciéndolo, además, de forma ininterrumpida, y manteniendo la esencia con la que fueron creadas. Este año estos dos aspectos cobran, si cabe, una mayor importancia por la situación que nos ha tocado vivir, que ha complicado el devenir de numerosas competiciones deportivas. Pero desde el Monte Real, conscientes de la importancia de seguir apostando por la vida y el deporte, hemos hecho un gran esfuerzo para que el Conde de Gondomar pudiese celebrarse", comenta el presidente del Monte Real Club de Yates, José Luis Álvarez.

El trofeo, uno de los más carismáticos de la vela en España, vuelve a disputarse un año más gracias a la colaboración de Banco Sabadell, que lleva varias ediciones apostando por el club baionés y la vela de altura. "Me gustaría agradecer al Monte Real Club de Yates que siga contando con SabadellGallego en un evento que forma parte de la tradición regatista de Galicia gracias al enorme esfuerzo puesto en su celebración. Trabajamos unidos para recuperar la naturaleza, el turismo y el deporte; para recuperar, en definitiva, la normalidad en estos tiempos revueltos", resume el director general de Sabadell Gallego, Pablo Junceda.

El 45º Conde de Gondomar-Trofeo Banco Sabadell se prolongará durante cuatro días, coincidiendo, como viene siendo tradición, con las jornadas que rodean al 25 de julio, día grande de Galicia. El jueves 23 será el día de preparativos, con el cierre de inscripciones y la entrega de instrucciones a los participantes. Habrá, además, una reunión de patrones en el Monte Real a las ocho de la tarde.

La competición empezará el viernes 24 con la Regata Conde de Gondomar, la más emocionante del trofeo por su larga distancia, de casi 100 millas de recorrido. A las once de la mañana, los veleros pondrán rumbo, desde la bahía de Baiona, al Carrumeiro Chico, en la ría de Corcubión, que deberán virar antes de iniciar el regreso. Serán numerosas horas de navegación pasando por gran parte de la costa gallega, un recorrido en el que las tripulaciones podrán optar por un trazado interno, más próximo a la costa; o externo, por el exterior del Parque Nacional de las Islas Atlánticas.

Se trata de una de las pruebas de larga distancia más importantes de España y un gran desafío para los navegantes, que no solo deberán hacer frente a las condiciones del mar sino también al cansancio que implica regatear durante tantas horas. En la edición anterior algunos barcos tardaron más de 24 horas en completar el recorrido. El último vencedor de la subida al Carrumeiro Chico, en 2019, fue el "Yess Too", del armador y patrón portugués Rui Ramada, tras 17 horas y 36 minutos de navegación.

El sábado 25 se celebrará la Regata Erizana, de menor distancia, en la que participarán los veleros que no compitieron en la jornada inicial. Para ellos el comité de regata preparará un recorrido que tendrá al archipiélago de las Ons como protagonista, con los veleros virando el faro de Camouco antes de regresar de nuevo a Baiona.

El domingo 26 se disputarán las últimas pruebas, más técnicas. En el fondeadero de Cíes se programarán, a partir del mediodía, varios recorridos barlovento-sotavento entre boyas, unas mangas que decidirán a los ganadores. Será al finalizar estas pruebas cuando las tripulaciones regresen a tierra para la entrega de premios, programada para las seis y media de la tarde en el Monte Real.

En la presentación oficial celebrada ayer en Baiona estuvieron presentes, además del presidente y comodoro del Monte Real Club de Yates, José Luis Álvarez e Ignacio Sánchez Otaegui, el Director General de Banco Sabadell, Pablo Junceda; el alcalde de Baiona, Carlos Gómez; el jefe provincial del servicio de deportes de la Xunta de Galicia, Daniel Benavides; y el diputado de deportes de la Diputación de Pontevedra, Gorka Gómez.