Aforo repleto, recuerdos, obsequios, mensajes y amor. El catálogo completo en el homenaje que la Federación Gallega de Atletismo le dedicó ayer a Alejandro Gómez en el Hotel Coia. El Galgo de Zamáns pudo acudir a la cita e incluso dirigirse a los asistentes cuando los discursos de los demás concluyeron. "Ha sido muy emotivo", describe el presidente federativo, Isidoro Hornillos.

Los salones del Hotel Coia estaban repletos, respetando las distancias de seguridad propias de la época. La Federación Gallega había planteado un acto "sumativo y abierto a todos", compendia Isidoro Hornillos. Y nadie se quiso perder la oportunidad de demostrar en persona a Alejandro Gómez aquello que habían expresado en redes sociales o en corrillos desde que se supo que el olímpico vigués sufre un tumor cerebral incurable.

Asitieron representantes de las principales instituciones, como el secretario xeral para o Deporte, José Ramón Lete Lasa, y el concelleiro de Deportes, Manel Fernández. Estuvieron dirigentes de los tres clubes gallegos vinculados a la carrera de Alejandro: Real Club Celta, New Balance y San Miguel de Oia. También otros como el Redondela o el Atletismo Sar-San Petroni. Y organizaciones en general de todo tipo, como la Asociación de Veciños Cristo da Vitoria. Resaltó la presencia de compañeros que compartieron con Alejandro Gómez una época dorada del atletismo gallego: Julia Vaquero, Carlos Adán, Óscar Fernández... La mayoría tuvo la oportunidad de dirigirse a Alejandro.

La Federación Gallega se reservaba algunas sorpresas: mensajes de vídeo enviados por personalidades como el presidente de la Federación Internacional de Atletismo, Sebastian Coe; el presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco; la campeona olímpica Ruth Beitia y organizadores que disfrutaron del talento de Gómez, como los del Cross de Sonseca y el de Elgoibar y la Media Maratón del País Vasco. Especialmente conmovedor fue el mensaje de la hermana del maratoniano Diego García, que falleció en brazos de Alejandro en 2001, durante un entrenamiento en Azkoitia, por culpa de un infarto.

"Ha sido un acto muy emotivo, con una gran expresión de valentía por parte de Alejandro", comenta Isidoro Hornillos. La mujer de Alejandro, Paula Hernández, se encargó de recoger todos los obsequios. Pero Alejandro recibió personalmente la medalla de oro de la Federación Gallega. "Todos los que estábamos allí teníamos en común nuestro deseo de expresar nuestro sentimiento, admiración, reconocimiento y empatía hacia este gran hombre. Al final él incluso habló. Yo tenía cierta esperanza de que hablase pero claro, en su estado...". El vigués tomó el micrófono y repartió agradecimientos. Hornillos resume: "Estoy contento por la oportunidad que nos brinda la vida de decirle a Alejandro que gracias, que lo queremos, que nos honra con toda la contribución que ha tenido al atletismo".