Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La loca carrera del Mos

El equipo entrenado por Telmo González, que hace seis años no tenía jugadoras para competir en fútbol once, ha logrado un histórico ascenso a Primera Nacional femenina

Equipo de la Unión Deportiva Mos al comienzo de esta temporada. // FdV

Les ha faltado la fiesta en el campo, los abrazos con sus amigos y familiares, el baño en los vestuarios y el resto de rituales que acompañan una conquista como la suya. Pero nada empaña la felicidad del equipo femenino de la UD Mos que la próxima temporada acompañará al Sárdoma y MosValladares Algo impensable cuando hace seis años, tras unirse al Pazos de Borbén, el equipo competía en fútbol siete porque no tenía jugadoras suficientes para el fútbol once. Pero desde aquel momento se subieron a una ola que las impulsó a la Liga Gallega y en su tercer intento -tras rozarlo hace un año- situarse en la élite del fútbol femenino español. El miércoles se produjo la confirmación oficial. El Mos Tenía en su mano la disputa del play-off por el ascenso, pero la imposibilidad de disputarlo les ha evitado ese trance y la Federación Gallega anunció el miércoles que la plaza en Primera Nacional les correspondía a ellas.

Pablo Serodio, presidente de la directiva que lleva ocho años al frente del club, tiene claro que el éxito es imposible de entender sin la figura de su entrenador, Telmo González: "Es justo reconocérselo. En el club se ha hecho un gran trabajo este tiempo con el fútbol femenino, pero fue esencial el cambio que supuso su llegada. Conoce el medio, los equipos, las jugadoras y tiene una enorme capacidad de trabajo".

El ascenso del primer equipo del Mos es la bandera de un trabajo que se está realizando en ese club por crecer en el fútbol femenino de forma constante. Serodio recuerda que "en poco tiempo hemos pasado de tener unas pocas fichas a las cien que seguramente vamos a tener la próxima temporada. Ya hay equipo alevín e infantil femenino, la próxima temporada tenemos intención de hacer un filial, un femenino B. Esto es una revolución que viene para quedarse y se equivoca el que no se suba a este tren o se oponga".Recogiendo frutos a mucha velocidad

El entrenador, Telmo González, está casi tan feliz por el ascenso como por el grupo que ha conseguido formar este tiempo. "Hubiera sido imposible de otro modo", asegura. El técnico cree que están recogiendo frutos con mucha velocidad y que seguramente su mayor logro como responsable del Mos pese a que tenían ofertas para jugar esta temporada en Primera Nacional. Diez de ellas podían haberse ido el pasado verano porque les llegaron propuestas de otros clubes y solo dos aceptaron. El resto se quedaron con nosotros y apostaron por el proyecto. Ese tal vez es nuestro gran logro porque renunciaron por el Mos a jugar en una categoría mejor, más cerca de su casa en algunos casos y recibiendo una compensación económica que nosotros no podíamos darle". Aunque esta circunstancia, en palabras del entrenador, también supuso una carga extra de responsabilidad porque "de alguna manera quieres compensarlas por ese esfuerzo que han hecho y nos cargamos algo de presión con el objetivo de ascender esta temporada. No solo por el club o por mí, lo quería por ellas, por el esfuerzo y sacrificio que han realizado".

Y todo fluyó durante la temporada. El Mos, un equipo joven y al que le queda un largo recorrido, se instaló en la primera posición y ya no cedió en esa carrera para lograr el ascenso en su tercer intento: "Es impresionante porque hemos visto ejemplos cercanos como el del ValladaresYa nos dicen algunos clubes que vamos demasiado rápido", explica Telmo.

Ahora viene otra parte importante del cuento y es preparar una plantilla de cara a una temporada en la que se dispara la exigencia. El presidente no siente miedo ante lo que vendrá: "Si tenemos ciertas ayudas desde el punto de vista presupuestario, y confío que sí, no debería haber problema. Sí, aumentan algunos gastos, pero no nos asustamos lo que viene, lo vivimos con ilusión". A Telmo González le corresponde ajustar la plantilla. Habrá continuidad en el grupo, refuerzos que puedan subir el nivel en alguna posición, pero sobre todo la misma filosofía: "Hemos crecido gracias a que las jugadoras han hecho de esto un hogar. Llegan una hora antes cada día solo para estar juntas. Si alguna piensa en ella antes que en el equipo está claro que este no es su sitio. Eso es lo que no podemos cambiar".

Compartir el artículo

stats