La propuesta de la Comisión de Presidentes para las categorías nacionales debe encajar entre el fútbol profesional -lo hará si se cumplen los planes de LaLiga- y las divisiones que son competencia de las federaciones autonómicas; al menos, en lo que respecta a las fronterizas, como por ejemplo Preferente. Que esa comisión haya estado formado por los dirigentes territoriales debería garantizar la resolución del puzle.
En Galicia, el equipo gestor dirigido por Rafael Louzán resolverá qué decisión presentar a la asamblea tras haber recabado una ingente información sobre diagnósticos y deseos del fútbol gallego. Louzán se ha reunido con los representantes de más de 900 clubes durante las últimas semanas a través de 15 encuentros telemáticos. Han tenido voz los 4 representantes gallegos de Segunda B, los 20 de Tercera, los 40 de Preferente, los 90 de Primera Galicia, los más de 380 de Segunda y Tercera Galicia, el fútbol femenino (Liga Iberdrola, Reto Iberdrola, Primera Nacional Femenina y Primera y Segunda Gallega) y más de 100 clubes de fútbol sala (Primera, Segunda, Segunda B y Tercera masculinas, además de Preferente; Primera y Segunda femeninas y División de Honor Juvenil). En los próximos días será el turno del fútbol sala de las ligas locales y del fútbol veterano.
La Comisión Deportiva trabaja sobre tres alternativas: anulación total de la temporada, reinicio cuando existan garantías sanitarias o validar las clasificaciones del 14 de marzo, con los ascensos estipulados pero sin descensos.
