Una semana después de su debut en el Mundial, en su segundo gran premio en la categoría máxima y con los kilómetros de pretemporada muy justitos, Jorge Prado ha sobrevivido al infierno climatológico de Valkenswaard y lo ha hecho con muy buena nota.

El gallego llegaba a la primera cita sobre terreno blando con las limitaciones de no haber hecho pretemporada sobre arena y temía que eso le pudiera crear problemas. No lo pareció en la manga clasificatoria, cuando terminó tercero después de pelear de tú a tú con los mejores de la categoría reina, ni tampoco en la manga inicial en la que Prado presentó sus credenciales en la clase de los mayores. Hizo el holeshot, aguantó los primeros ataques y tras ser superado por Gajser, Herlings y Jasikonis, marcó un ritmo constante para terminar cuarto dejando atrás a muchos de los grandes nombres del mundial y demostrando lo que será capaz de hacer cuando haya alcanzado su máximo nivel de forma.

Tras esa primera manga brillante, Prado soñaba con el podio y salió a por todas en la segunda manga, tanto que en la misma recta de salida se fue al suelo a gran velocidad, perdiendo sus opciones. Aún así Jorge se levantó de la montonera e inició una nueva carrera bien distinta remontando, adelantando corredores, sufriendo con el barro sobre las gafas y consiguiendo terminar en un meritorio 13º puesto, que unido al cuarto puesto de la primera le otorgan la novena posición en este Gran Premio de Holanda.