En menos de dos semanas el Deportivo propondrá a sus accionistas la aprobación de tres ampliaciones de capital para aliviar la "desastrosa " situación económica por la que atraviese, justificó ayer el presidente Fernando Vidal. Las dos primeras ampliaciones son compensatorias (de cinco y 30 millones de euros, respectivamente) y la tercera es dineraria. Las dos primeras servirán para compensar parte de la deuda que el club mantiene con Abanca y la tercera, dividida en tres fases, está dirigida de forma "preferente" a los accionistas actuales con una tercera fase de concurrencia libre en la que el maximo dirigente blanquiazul espera conseguir superar la barrera de los 26.000 accionistas.

Vidal, en su comparecencia en la sala de prensa del estadio de Riazor, dio lectura a un informe en el que se explica que la deuda del Deportivo asciende a 90,8 millones de euros, de los que 84 tienen que pagarlos en el plazo de doce años. De esa cantidad, el club mantiene con Abanca un debe de 62,5 millones, que se verán reducidos a 27,5 por medio de la ampliación compensatoria destinada en exclusiva a liquidar parte de ese préstamo con la entidad financiera, mediante la capitalización de la cantidad estipulada, 35 millones.

La capitalización permitirá a Abanca convertirse en el accionista mayoritario con el 44% del capital social, siempre que se cubriese la tercera fase al completo, o con el 78% de dicho capital, si esa tercera fase quedase descubierta. Son los dos extremos, aunque Fernando Vidal espera que en ese tercer apartado concurran el máximo número de accionistas actuales, a los que el club pretende garantizar su "derecho de suscripción preferente"; pero al mismo teimpo señaló que aspiraba a superar la barrera de los "26.000 accionistas", en la actualidad el Deportivo cuenta con 25.333 socios y un capital social de 10,29 millones de euros, que se convertirán en 45 millones simplemente con la aprobación de las dos primeras fases, las de "compensación de créditos".

Es "la única medida real", dijo Vidal, que considera que la entidad se encuentra en medio de "una cirugía delicada, con un enfermo en estado muy crítico, que solo con el esfuerzo de todos los accionistas y de Abanca podremos curar". Sin la capitalización de parte de la deuda con Abanca, el club podría subsistir, pero tendría que pagar "algo más de 8 millones de euros cada año, más intereses, durante los próximos doce años", para satisfacer la deuda; "¿podríamos competir?", se preguntó. "Dispondríamos de un límite salarial de 3 o 4 millones". Además, afirmó el presidente blanquiazul, con esta medida evitarán pagar alrededor de "8 millones de euros en intereses". Un ahorro que afectará considerablemente al tope salarial de la próxima temporada. "Por esto pasa la viabilidad del club", aseveró, pues considera insuficientes los ingresos que se pudieran generan por publicidad y rescisión de contratos. "no era factible".

La entrada de Abanca en las dos primeras fases elevará considerablemente el capital social, la duda es si la entidad financiera entrará también en la tercera fase. "No sé lo que hará, ni lo que hará cada accionista con sus acciones; y tengo mil y pico y tampoco sé lo que haré en un futuro". Sin embargo, dejó la puerta abierta a otra posible capitalización de la deuda con la entidad financiera tras otra renegociación de la deuda. "Estamos estudiando esa posibilidad; Abanca encargó un estudio de viabilidad y se sabrá el resultado antes del 30 de junio", respondió. "Por suerte, Abanca va a poner muchísimo dinero y el Deportivo va a ser un club diferente, saneado para el futuro y siendo un poco de todos", agregó.