Pep Guardiola, considerado por Zinedine Zidane el "mejor entrenador del mundo", examina la reconstrucción del Real Madrid. Con el 2-6 de Guardiola en el Bernabéu en el recuerdo y solo una derrota del técnico catalán en el territorio madridista. Pero también con la exhibición de los "atletas" como definió Pep el fútbol de un Real Madrid que lo atropelló cuando dirigía al Bayern. Con Zidane de ayudante de Ancelotti. La batalla táctica promete emociones fuertes con un Real Madrid afectado por la recaída de Eden Hazard en su grave lesión.

Debe recuperar la magia de las grandes noches el madridismo en el Bernabéu. Solo tres triunfos en los nueve últimos partidos de local y la pesadilla de hace un año ante el Ajax (1-4) cuando de golpe, en una semana, perdió todo por lo que peleaba.

Busca fórmulas el técnico madridista que debe decidir si regresar a la fórmula de cinco centrocampistas con la que conquistó la Supercopa de España o atacar con más delanteros al City. Con la novedad de Mendy en el lateral izquierdo por Marcelo, el regreso al centro del campo de Fede Valverde tras su paternidad. La búsqueda de gol pasa por dar la titularidad a Gareth Bale. La principal duda por despejar es premiar el momento de Isco o mantener a Modric.

La eliminatoria ante el Real Madrid llega en el momento más complicado desde que el dinero árabe entró en Manchester hace más de diez años. La sanción de la UEFA, que impedirá al City, salvo cambio en la apelación, disputar competiciones europeas en los dos próximos años ha condicionado el futuro a corto plazo del equipo.

Un City que ha gobernado con puño de hierro los dos últimos años en Inglaterra, reclamando siete de los últimos ocho torneos domésticos, y que ha pegado un bajón esta temporada. Con la liga imposible, a 22 puntos del Liverpool, quiere dar un bofetazo a la UEFA y reinar por primera vez en Europa. Lo intentará con un equipo muy poderoso en ataque y pobre en defensa.