Entrega de medallas en el Campeonato Gallego de Pruebas Combinadas Individual, disputado este fin de semana en la pista cubierta instalada en Expourense. José Carlos Tuñas, responsable del sector de velocidad de la Federación Gallega, reparte metales del pentatlón femenino sénior. Lucía Sánchez del Valle y Lucía Seijas, ambas del Atlética Lucense, suben al podio y recogen plata y bronce. La campeona, la céltica Eva Queimaño, permanece en el suelo. Tuñas espera primero, después interroga.
- No voy a subir-, le anuncia Queimaño.
Tuñas le entrega la medalla en mano, mientras el padre de Lucía Sánchez del Valle, situado entre los que contemplan la escena, lo entiende y le explica:
- Tuñas, porque la federación tiene que cuidar más a sus atletas.
El campeón del heptatlón sénior masculino, el lucense Adolfo Sainz-Maza, repetirá la negativa a subir al podio igual que las ganadoras Lucía Dopico en sub-18 y Carlota Salgado en sub-16, todos del Celta. Se les suma Adrián Carreira, del Narón, segundo en sénior. Protestan así contra la supresión del Campeonato Gallego de Pruebas Combinadas de Clubes, que los dirigentes federativos acordaron en diciembre. Una decisión que los "combineros" consideran muy lesiva por la escasez de citas en su modalidad. Limitados al certamen autonómico individual, algunos han tenido que buscar pruebas fuera de Galicia en el asalto a las mínimas del Campeonato de España en Pista Cubierta y otros objetivos.
El campeonato por clubes se organizaba tradicionalmente a finales de diciembre como la primera de las dos citas gallegas en la temporada de pista cubierta de pruebas combinadas. En Vigo se tuvo la certeza de que no habría edición en este ejercicio a mediados de ese mes, cuando el presidente de la Federación Gallega, Isidoro Hornillos, y otros directivos asistieron en la Casa do Deporte de Luis Ksado a una reunión informativa sobre el futuro de las pistas de Balaídos.
El entrenador céltico David Gómez interpeló a Hornillos y sus colaboradores sobre esta eliminación. Gómez, decatleta olímpico en Atenas 2004 y Pekín 2008, fue responsable federativo del sector durante la temporada 2018-2019. Dimitió al entender que Hornillos, su secretario, Carlos Castro, y su director técnico, Julio Santiago, ignoraban sus propuestas y criterios. A Gómez le explicaron en Luis Ksado que problemas de calendario en Expourense obligaban a suspender el Gallego de Clubes. Aludieron a los cambios de categoría de edad a partir del 1 de enero. Además, la Federación Española ha modificado su cronograma para adecuarse al común europeo. Ahora las temporadas coincidirán con el año natural y se iniciarán en enero.
Argumentos que Gómez y los principales especialistas gallegos rechazan. La Federación Española, al tratarse de un periodo de transición en el sistema, valida las marcas de noviembre y diciembre de cara a los Campeonatos de España de 2020. Y Gómez detectó que en Expourense había fechas libres tanto el fin de semana del 21-22 de diciembre, sin actividad, como el del 28-29, con solo un control programado. El entrenador cree que incluso hubiera podido disputarse el 4-5 de enero. "Tenemos un Ferrari en el garaje, no dejéis que se oxide", les escribió al presidente y al secretario de la Federación Gallega respecto a la infrautilización de las pistas de Expourense.
En realidad, el Campeonato de Galicia de Pruebas Combinadas por Clubes habría podido organizarse incluso al aire libre. La Federación Española, consciente de las carencias en infraestructura de parte del país, admite esas marcas para pista cubierta. Pero no hubo marcha atrás en la anulación. Una de las consecuencias inmediatas es que Lucía Sánchez del Valle, que aspiraba a figurar entre las cuatro primeras del ranking español juvenil para participar en el Trofeo Ibérico -duelo combinero entre España y Portugal- el 25 y 26 de enero, tuvo que explorar vías alternativas en la persecución de la marca. La selección iba a quedar cerrada el 12 de enero, sin ninguna cita en Galicia antes de la del pasado fin de semana en Expourense. Participar en el Torneo Ibérico hubiese proporcionado a Sánchez del Valle, subcampeona de España en cadetes, la etiqueta internacional, facilitando su acceso a la condición de DGAN (deportista galego de alto nivel). La lucense pidió permiso a la Federación Madrileña para participar en el autonómico capitalino. Compitió y se quedó a cuatro puntos de la cifra necesaria.
En el caso de los dominadores actuales del panorama gallego, Eva Queimaño y Adolfo Sainz-Maza, su complicación consistía en limitarse a un intento de firmar la mínima del Nacional Absoluto, a expensas de cualquier nulo o desliz. Queimaño, adiestrada por David Gómez, ha solventado en parte esa angustia. En el Gallego Individual ha firmado 3.399 puntos; mínima para el Nacional Sub-23, lo que le otorga otro asalto y quizá incluso ya suficiente en la repesca. A Sainz-Maza, pupilo de Juan Luis Trillo, no le valen sus 4.467 puntos y ha pedido permiso para competir en Asturias.
"Es un problema bastante importante", comenta Eva Queimaño sobre la supresión del Autonómico de Clubes. "Expresa una falta de interés por parte de la federación en el sector de pruebas combinadas. No es por el hecho del título ni por las medallas, sino porque restringes a los atletas de lograr la meta que buscan o simplemente del mero hecho de disfrutar de lo que les gusta. Es un poco injusto. A un corredor de 60 metros lisos, por ejemplo, se le organizan multitud de controles. Obviamente el 60 es mucho más sencillo de organizar y lleva menos trabajo pero, en mi opinión, independientemente de la prueba que realices o de las marcas y logros que alcances, se debe tratar a todos por igual. Por eso me negué a recoger la medalla subida al podio".
"En este pentatlón no tuve ningún contratiempo y pude cumplir con el objetivo, pero no todos contamos siempre con esta suerte. No es la primera vez que los atletas se tienen que desplazar para conseguirlo", abunda la viguesa. "Yo misma he tenido que ir a O Pombal o Salamanca otros años para conseguir ciertas marcas. En otras comunidades se realizan controles de marcas de pruebas combinadas, con tres o cuatro competiciones".
La fórmula elegida para protestar surgió en el momento, en los corrillos de Expourense. "Nuestra protesta fue con el fin de mostrar nuestro descontento con la federación. Sentimos que no se nos valora y que nuestras necesidades son menos importantes que las de los demás. Protesté por mí, pero sobre todo por las generaciones que están por venir. Me gustaría que tuviesen los mismos recursos que tuve yo o más; que se llegase a realizar una tercera competición de pruebas combinadas.Esta modalidad es tan valida e importante como el resto".
