Pachanga especial en las canchas de Samil; en aquellas del final del paseo, ahora con varios aros rotos, donde se han criado numerosas generaciones de baloncestistas vigueses. Es 31 de diciembre y sobre esas baldosas, que también hollaron figuras como Salvo y Romay, alcanza José Antonio Rodríguez los 80 años. Y los cumple encestando.

Rodri comenzó tirando a un cuadrado pintado en la pared de la calle Roupeiro. en los años cuarenta. Se formó después en el Labor y lo fichó el Estudiantes, donde compartió vestuario con Codina, Montilla o Mimum. Jugó en Álvarez y Ademar. Cerró su carrera con dos títulos del Campeonato de España de Empresas y seis gallegos.

Aunque retirado de la competición oficial antes de los 30, durante medio siglo no ha faltado a su cita con las canchas de Samil. Cientos de jugadores han compartido partidos con él; el último, Adrián Pereira, de 9 años, el más joven de los que asistió a tan especial cumpleaños.